J. Manuel García-Margallo
Cabeza de lista por Alicante del PP
«Suprimirla es colaborar con la desaparición de la provincia»
Rotundamente, sí. Las diputaciones vertebran, estructuran y dan sentido a la organización provincial. Son sus instituciones de referencia. Dan servicio a todos los municipios, pero esencialmente a los más pequeños. Prescindir de ellas supondría dar paso a una estructura débil y comarcalizada, muy alejada de otras administraciones autonómicas y nacionales.Son instituciones saneadas y ágiles. Sin la Diputación, la provincia de Alicante dejaría de serlo y la quiero demasiado como para colaborar en su desaparición.
Rita Bosaho
Cabeza de lista de A la valenciana
«Han servido al despilfarro y la corrupción. Hay que cerrarlas»
Hay que garantizar la financiación y los servicios de los pueblos pequeños y zonsas rurales. Sin embargo, las diputaciones han servido mucho más para el despilfarro y la corrupción que para cubrir estas necesidades, y buena muestra de ello han sido las de la Comunidad Valenciana con varios presidentes imputados. Proponemos quitarlas y utilizar estos recursos reforzando la financiación autonómica y municipal. Los municipios deben tener un papel fundamental. En zonas rurales apostamos por las mancomunidades.
Julián López-Milla
Cabeza de lista por Alicante del PSOE
«Su labor puede hacerse sin tanto aparato político»
Considero útiles la mayoría de los servicios que las diputaciones prestan, pero es necesario modernizarlas, rediseñando su papel como espacio de encuentro entre los ayuntamientos de menos de 20.000 habitantes y dota?ndolas de competencias prestadoras de servicios que supongan una mejora de eficacia y eficiencia respecto a los municipios, siempre con criterios de ma?xima trasparencia, racionalidad y democracia. Para llevar a cabo su labor, no necesitan tanto aparato político. Es posible hacer lo mismo de manera más barata.
Marta Martín
Cabeza de lista por Alicante de Ciudadanos
«Como instituciones son una reliquia y hay que quitarlas»
Las diputaciones como instituciones son una reliquia. De cada 10 euros del presupuesto, 6 se quedan en la Diputación y cerca de la mitad se destina a puestos políticos y burocráticos. Proponemos profundizar en la racionalización administrativa y gestionar de manera más eficiente y barata a través de mancomunidades y fusiones los servicios que prestan, que son fundamentales. Queremos suprimirlas preservando la identidad de los municipios y los servicios para los ciudadanos.
