La cifra podría ser de mediados de 2011, por nombrar uno de los años más duros de la crisis. Sin embargo, y a pesar del bombardeo de mensajes acerca de una supuesta recuperación económica, la percepción de los valencianos sigue siendo la misma cinco años después. La situación no mejora, o al menos así lo sienten los votantes. Probablemente muy ligado a este hecho, la opinión sobre la situación política no se revela mucho mejor, aunque la política «a la valenciana» ha absorbido mejor el golpe. En el primer caso, siete de cada diez valencianos sostienen que la economía autóctona es mala o muy mala. En el caso de la política valenciana, el 65,9 % cree que es negativa, frente al 81 % que opina lo mismo para la política española.

Así se desprende del sondeo elaborado por Invest Group para INFORMACIÓN y Levante-EMV. La muestra, que se ha elaborado a partir de 750 entrevistas realizadas entre el 31 de mayo y el 7 de junio y que tiene un margen de error del +/- 3,65%, desgrana por provincias, franjas de edad y sexo la valoración que hacen los valencianos sobre la coyuntura económica y política actual. A tenor de sus resultados, los valencianos tienen una valoración «altamente negativa» de la economía local, aunque ha mejorado levemente con respecto al sondeo publicado el pasado mes de octubre. En aquella ocasión, el 0,3 % de los encuestados manifestó considerar «muy buena» la economía. Hoy lo hace un 0,6%. Suben los optimistas pero también los pesimistas, ya que del 67,7% de los valencianos que hace ocho meses sostenían que la economía era mala o muy mala, ahora son el 69,3%.

Por sexos, las mujeres tienen una visión más negra del panorama. El 70% de ellas cree que la situación es mala o muy mala, frente al 68, 6% de los hombres que coinciden con esta valoración. Los ciudadanos entre 35 y 49 años comparten este desmoralizado punto de vista, seguidos de los valencianos entre 50 y 64 años. Son los más jóvenes, entre 18 y 24 años, los que, aún siendo elevado el índice, ven las cosas un poco mejor. En concreto, el 65% de ellos. Por provincias, Castellón y Alicante se sitúan por encima en cuanto a desencanto con la situación económica, con un 70,5% de los encuestados insatisfechos. En Valencia son un 69,1%. Los más felices con el contexto son los castellonenses, con un 6%, seguidos de los valencianos, con un 5 % y los alicantinos, con un 3,5% de los sondeados que ve esta etapa como buena o muy buena.

Desencanto político

Al dato que deberían estar atentos los candidatos al Congreso es al de la percepción a nivel estatal. Los valencianos suspenden tanto la economía como la política. En el primer caso, ha habido un aumento de descontentos importante. El pasado mes de octubre sostenían que la economía era muy buena el 0,5%, ahora solo el 0,2%. Hace ocho meses el 61,9 creía que era mala o muy mala, ahora el 66,7%. Por edades, el 7,7% de los votantes comprendidos entre los 25 y los 34 años sostenían que la situación era buena o muy buena, dato que ha caído hasta el 5,2 % en esa misma franja de edad.

La encuesta cristaliza además la pésima valoración que los valencianos hacen de la política, tanto autonómica como estatal, aunque la peor parte se la lleva esta última. El 81 % de los participantes en el sondeo estima que la situación política española es mala o muy mala, frente al 65,9% que opina lo mismo de la valenciana. Se trata de 15 puntos menos en la escala del descontento.

Así, ocho de cada diez entrevistados lamentan las condiciones en las que vive la política estatal. Por provincias, el 44,8% de los alicantinos cree que es muy mala, frente al 44,5% de los castellonenses y el 43,8% de los valencianos. Estos últimos son los que más sostienen que es mala, con un 39,7% de los encuestados. En Alicante esta cifra se reduce al 33,5% y en Castellón, al 35% de los sondeados.

De nuevo, los hombres se muestran ligeramente más optimistas que las mujeres. El 78% de los valencianos entrevistados cree que la situación política estatal es mala o muy mala, una cifra que aumenta hasta el 84,1% en el caso de las mujeres, que califican la situación política actual muy negativamente.

El 20% de los hombres califica la coyuntura de «regular», es decir, ni muy bien ni muy mal. Seis puntos por debajo se encuentran las mujeres, que tienen más claro y polarizado su punto de vista sobre esta cuestión.

Por franjas de edad, de nuevo el grupo entre los 35 y los 49 años son los más extremistas. El 35,5 % de ellos opina que la política española es mala o muy mala. Les siguen los de entre 50 y 64 años, con un 82,4% de los encuestados favorables a esta percepción. Los jóvenes entre 18 y 24 años son los siguientes más críticos, en concreto, un 81,1%.