¿Qué reto se ha marcado David Rodríguez para el 20-D?
Recuperar el espacio de la izquierda alternativa en el Parlamento español. Hace 20 años que EU no tiene un diputado por la circunscripción de Alicante. Y también queremos contribuir a que Alberto Garzón tenga un grupo fuerte y podamos ser determinantes en ese cambio que se va a producir.
¿Ve factible obtener un escaño en el Congreso por Alicante?
Estamos notando muy buenas sensaciones, más allá de lo que las encuestas dicen. Lo que estamos viviendo al recorrer todos los municipios nos da a entender que nuestra fuerza estará presente. Porque corremos el riesgo de que no se produzca esta segunda transición. Lo vemos difícil, pero las sensaciones son buenas y vamos remontando. Además hemos de tener en cuenta que hay más indecisos que nunca. Son las elecciones más abiertas por la irrupción de nuevas formaciones y por esa indecisión.
¿Qué mensaje le trasladaría a ese más de 40% de indecisos?
Por un lado, a la gente que se considere de izquierdas y quiera una salida social de la crisis, le diría que nosotros representamos la mejor opción. Primero, porque cuando hemos tenido opción de gobierno, hemos aplicado las políticas que prometimos. Somos coherentes. Los otros han estado en una búsqueda hacia la centralidad política y la mercadotecnia.
A nivel personal, ¿usted se considera de izquierda o de extrema izquierda?
De izquierda transformadora. Soy militante del Partido Comunista y de Izquierda Unida desde hace casi 20 años. Nos consideramos de una izquierda que en otros contextos es revolucionaria o alternativa. Somos antisistema y anticapitalistas, porque este sistema lo asociamos a la corrupción y a la explotación del ser humano.
¿EU se encuentra ante uno de los peores momentos de su historia?
Hemos pasado épocas complicadas. Algunas, incluso más duras, con escisiones históricas como la de Iniciativa. Eso no son las formas de la nueva ni de la vieja política. Ahora no es el mejor momento en cuanto a resultados en algunas ciudades, pero aumentamos los resultados en las municipales y tenemos más alcaldías, como en Monforte del Cid, Aspe, Callosa... Además estamos en la Diputación 20 años después. No es el peor momento, aunque tampoco el mejor. De todas formas, estamos en un proceso para ir repensando el futuro.
EU, por tanto, no tiene fecha de caducidad.
No... A lo mejor se dan nuevos espacios de confluencia de la izquierda. Esperamos que EU tenga un largo recorrido. Vamos a seguir trabajando en las calles y en la parte política y electoral.
Me ha hablado de la Diputación. ¿Usted es partidario de cerrarla?
Es una estructura que no es del todo democrática, porque es de elección indirecta. Las consideramos anacrónicas porque no responden a las necesidades actuales y tienen un modelo casi feudal. Se están convirtiendo en trampolines políticos para mucha gente y en una cadena de favores. Queremos abolirlas.
¿Qué faltó para que su partido se sumara a Compromís y Podemos?
Por un lado, las formas no fueron las adecuadas. Nosotros veníamos en un proceso de búsqueda de la unidad de la izquierda alternativa al bipartidismo y ahí surgió Ahora en Común y Unidad Popular. Esta última estaba abierta a todo el mundo. Incluso hubo contactos para que se sumaran (Compromís y Podemos). En principio no estaban porque tenían su proyecto particular. Y ya casi en la prórroga, con unos días para presentar las candidaturas, nos llamaron, pero no se habló de programa. Y eso para nosotros es fundamental para alcanzar pactos. Además se nos invitó con un pacto ya cerrado. Se empezó a hablar de unos puestos de salida y no salida...
¿Se sintieron ninguneados?
Sí. Más que por la propuesta, por las formas. Hubo elementos indignos, por ejemplo cuando nos dijeron que nos saliéramos de la reunión porque querían hablar entre ellos (Compromís y Podemos). Llegamos a una mesa en la que queríamos ser un actor más... No queríamos garantizar sí o sí un puesto de salida, pero sí queríamos tener unas garantías de programa y respeto a nuestra representatividad. Además nosotros habíamos hecho un proceso de primarias dentro de Unidad Popular.
Para los ciudadanos que aún no lo sepan, ¿qué es Unidad Popular?
Es un espacio de convergencia de la izquierda alternativa que quiere apostar por una transformación. Nos presentamos con un programa de ruptura democrática para que se supere el régimen del 78, con valores republicanos, feministas y ecologistas, que ha sido elaborado de forma democrática y colectivamente. Hemos tratado a todo el mundo por igual.
Y a parte de EU, ¿qué partidos se han sumado?
Hay independientes, Alternativa Socialista, republicanos, un sector desencantado de Podemos y muchos activistas. Hay gente de todas las comarcas alicantinas.
