Nacido en Alcoy en mayo de 1965, Fernando Llopis no es un político al uso. Doctor en Ingeniería Informática, aterrizó en la primera línea con una dilatada trayectoria profesional a sus espaldas y con su plaza de profesor universitario garantizada. Fue precisamente la «deriva» en la que había entrado el modelo educativo español la que le hizo dar un paso al frente. A partir de entonces, todo cambió. Dejó de jugar al fútbol -su último partido data ya de hace más de cuatro años-, el cine pasó a mejor vida y las novelas dejaron paso a la lectura de periódicos locales. A cambio, Llopis puede presumir ahora de tener un vasto conocimiento de la ciudad. Durante los últimos cuatro años ha pisado todos los barrios, ha disfrutado de todas las fiestas y ha participado en cuantos actos se le ha invitado. Es el Mariano Postigo de UPyD. Sus perfiles en las redes sociales dan buena fe de ello. Especialmente, el de Twitter. Y es que Fernando Llopis es el rey de los «selfies». Ningún otro político de la ciudad puede presumir de haberse tomado fotografías con tantos ciudadanos. Pero si algo caracteriza al edil de UPyD es ser una persona de principios. Al menos, eso recalca él. «Cuando Toni Cantó se fue del partido, mi hija me preguntó: "¿Papá, tú no harás lo mismo, no?"». La respuesta ya se sabe. Lo que es una incógnita es qué le deparará el futuro. ¿UA o Ayuntamiento? Las urnas dirán.
