Ciudadanos ha resultado ser el partido más perjudicado por la ley electoral, con 694.470 votos que no se han traducido en escaño en el Congreso de los Diputados, lo que supone el 22,23 % del total obtenido en las elecciones generales del domingo.

Según el voto cosechado por las distintas candidaturas, un total de 3.123.769 electores eligieron las papeletas de Ciudadanos, pero sólo 2.429.299 se verán representados en la Carrera de San Jerónimo por los 32 diputados de C's.

Por contra, los 694.470 electores que optaron por el partido de Albert Rivera en 32 circunscripciones, entre ellas A Coruña, Ciudad Real, Girona, Huesca o Zamora, no tendrán representante naranja, ya que en dichas provincias C´s no ha obtenido ningún diputado. Y ello a pesar de que en algunos de estos territorios la formación superó el porcentaje medio de voto obtenido a nivel nacional (13,05%), llegando al 16,40% en Guadalajara, al 15,77% en Salamanca, al 15,41% en Huesca o al 15,32% en Segovia.

Podemos, otros damnificados

Tras Ciudadanos, ha sido la coalición Unidos Podemos la más 'damnificada' por la aplicación de la Ley D'Hont para repartir los escaños, ya que 288.677 de sus votos se han quedado sin traslación en las bancadas del Congreso. En concreto, 259.974 de los 3.201.170 electores de Podemos-IU-Equo no tendrán diputados entre los 45 escaños de la coalición, concretamente los de 14 circunscripciones como Almería, Ávila, Cáceres o Palencia.

La ley electoral castiga la dispersión del voto por provincias y premia la concentración en circunscripciones. Con prácticamente los mismos votos, unos 285.000, el PNV ha logrado cinco diputados y tendrá grupo parlamentario propio, mientras que el Partido Animalista se queda fuera del Congreso.

La aplicación de la ley D´Hont, pero sobre todo la delimitación de las circunscripciones y la asignación de escaños a las mismas, provoca que el número de votos necesario para lograr un escaño sea diferente en cada provincia y, además, que los partidos con una mayor implantación salgan favorecidos.

Los partidos más pequeños de ámbito nacional salen especialmente penalizados. Ese ha sido el caso de Ciudadanos, que ha necesitado más de 97.000 votos por cada uno de sus 32 escaños. En el extremo opuesto se sitúan el PP y el PNV, que logran un escaño por cada 57.000 diputados. Al PNV le favorece su concentración del voto en tres provincias, mientras que al PP le prima su fuerte presencia en provincias con menor población. Al PSOE y CDC les ocurre lo mismo, aunque en menor medida, y logran un escaño por cada 60.000 y 64.000 votos, respectivamente. A Podemos le cuesta algo más lograr un escaño.