El presidente del Gobierno y candidato del PP a la reelección, Mariano Rajoy, ha alertado este domingo contra los "cantos de sirena" del populismo, del radicalismo y de la bisoñez" que, a su entender, lo único que buscan en las elecciones del 20 de diciembre es sumar para echar al Partido Popular. A una semana de la cita con las urnas, ha pedido pensar a quién votar porque "puede uno encontrarse que vote a un candidato y acaba elegido otro" para gobernar tras los pactos postelectorales.

Así se ha pronunciado en un acto del PP en la plaza de toros de la localidad madrileña de Las Rozas, preparada para unas 4.300 personas que no ha conseguido llenar. Se trataba del mitin más multitudinario hasta ahora de la campaña electoral para las elecciones generales del 20 de diciembre, en el que ha estado acompañado por la presidenta del PP de Madrid, Esperanza Aguirre, y la presidenta de la Comunidad, Cristina Cifuentes.

Rajoy ha elevado el tono del discurso contra sus rivales y ha pedido el apoyo para el PP con el fin de mantener el actual rumbo. "Ahora cuando lo más difícil ya está hecho, no dejemos que los cantos de sirena del populismo, del radicalismo y de la bisoñez, nos desvíen del camino. El camino es el que nos va a llevar a 20 millones de personas trabajando en el año 2020", ha proclamado.

En este punto, ha defendido una vez más respetar que gobierne en España la formación que saque más votos y ha puesto sobre la mesa la posibilidad de que sus contrincantes puedan pactar ya que, a su entender, "solo coinciden en una cosa: echar a la lista más votada" para que no gobierne el PP.

"Hay que andar con mucho cuidado a la hora de ver a quien se vota, porque puede uno encontrarse con que vote a un candidato y acaba elegido otro con el que nada tiene que ver para gobernar", ha manifestado el jefe del Ejecutivo ante un público entregado.

Programas que son papel mojado

En este punto, el presidente del Gobierno ha defendido una vez más respetar que gobierne en España la formación que saque más votos y ha puesto sobre la mesa la posibilidad de que sus contrincantes puedan pactar ya que, a su entender, "solo coinciden" en desalojar al Partido Popular del Palacio de la Moncloa.

"El derecho al voto no está completo sin el derecho a saber lo que uno vota y, en estas elecciones, hay quien se presenta con un programa que es papel mojado porque no se presentan para gobernar sino para ver si suman los votos -ha enfatizado-- Da lo mismo que sus ideas sean distintas, da lo mismo que sus propuestas no tengan nada que ver. Solo coinciden en una cosa, echar a la lista más votada porque quieren que no gobierne el PP".

Por eso, ha advertido de que hay que "andar con mucho cuidado" a la hora de ver a quien se apoya el día 20. "Puede uno encontrarse con que vote a un candidato y acabe elegido otro con el que nada tiene que ver para gobernar", ha abundado, para resaltar que lo que necesita España es "estabilidad política" para gobernar de forma que "no ocurran cosas como las que han ocurrido en Madrid con el tijeretazo a la educación concertada".

El presidente del Gobierno ha puesto en valor la experiencia y ha defendido la trayectoria del PP frente a partidos que "empiezan y acaban con su candidato", en clara alusión a Albert Rivera. De hecho, ha dicho que hay candidatos que pueden decir: "Votadme a mi porque no he hecho nada mal". "Pero es que no han hecho nada bien. No han hecho simplemente nada", ha ironizado.

"Herencia envenenada"

Rajoy ha admitido que en estos años los españoles han tenido que hacer "muchos esfuerzos" pero ha querido dejar claro que no han sido "inútiles" porque, después de una "herencia envenenada" y cuando el rescate parecía "irremediable", el Gobierno del PP ha "dado la vuelta" a la situación. Ahora, ha proseguido, pueden convencer a los españoles de un futuro mejor porque su gestión en esta legislatura les "avala".

"No podemos parar ahora porque nos puede ir y nos irá, si hacemos las cosas bien y con sentido común, mucho mejor", ha afirmado, para subrayar que se han creado más de un millón de puestos de trabajo en los dos últimos años y el rescate "es ya triste historia de España". Por eso, ha insistido en que si mantiene el "rumbo" el esfuerzo "se verá premiado" mientras que si no lo hacen se habrán "tirado los sacrificios por la borda".

En su discurso, Rajoy ha puesto a Madrid como una región modelo que "mira a España y al mundo" como hay que hacer y que es motor económico y social. En este punto, ha elogiado la labor de los presidentes que ha tenido esta comunidad: Alberto Ruiz Gallardón, Esperanza Aguirre y Cristina Cifuentes, pero no ha hecho mención alguna a Ignacio González.