El portavoz del PSOE en el Ayuntamiento de Elda, Carlos Ortuño, criticó ayer la ausencia de la alcaldesa Adela Pedrosa en la manifestación del viernes en la que unas 1.500 personas pidieron mejoras en la sanidad de la ciudad.
El portavoz socialista señaló que "los eldenses que salieron a la calle el viernes lo hicieron en base a un sentimiento de cabreo ante los retrasos de más de nueve días para la atención primaria, la epidural o las mamografías que no se hacen" señalando también que "se salió a la calle con un sentimiento de esperanza y pensando que quiénes gobiernan atenderían a esas 1.500 personas, pero no lo hizo".
El grupo socialista en el Ayuntamiento de Elda calificó de "inaceptable" el hecho de que la alcaldesa de Elda no hiciera acto de presencia en la protesta del viernes. El portavoz socialista señaló que "no quiso estar con estos más de 1.500 vecinos ni antes, ni durante, ni después de la manifestación, y los vecinos no pudieron mostrarle sus reivindicaciones". Ortuño criticó la gestión de Pedrosa afirmando que "le guste o no le guste es la alcaldesa, le guste o no lo guste tiene que escuchar las reivindicaciones de los eldenses, le guste o no le guste tiene que decirle a sus compañeros de partido en Valencia, a los responsables de la sanidad, que lo que ocurre en Elda es tercermundista, le guste o no le guste, los vecinos tienen razón cuando se enfadan si les dan las citas en el médico de cabecera con más de nueve días de retraso, o pasan meses para el especialista o la epidural o las mamografías se convierten en una cuestión de suerte que según que días va una mujer le toca o no le toca". Según el portavoz del grupo socialista, los eldenses que se manifestaron el viernes son sólo "la punta del iceberg de un sentimiento generalizado de cabreo en la sociedad eldense ante el mal servicio sanitario".
