El incendio de contenedores de basura suma y sigue en el Alto y Medio Vinalopó. En la mañana del sábado ardieron dos en la calle Teide esquina Los Cisnes, muy cerca del parque de San Crispín de Elda. Y por la tarde la oleada continuó con otros cinco más en Elda y en la vecina localidad de Petrer. Uno en el polígono industrial de Salinetas y dos en el camino Els Platans de Petrer, y otros dos más a la altura del número 63 de la calle Maximiliano García Soriano en Elda.

Pero el domingo, a las 7.43 horas, los bomberos también tuvieron que acudir a sofocar las llamas en otro contenedor de Villena situado en la calle La Revoltosa.

Con los últimos fuegos ya son 70 los contenedores quemados en dos meses en el Alto y Medio Vinalopó. La Policía sigue investigando los hechos para tratar de detener a los autores ante pérdidas que oscilan ya los 25.000 euros.

Este diario ya adelantó el pasado sábado que los bomberos del Área Operativa del Vinalopó se habían enfrentado a otra noche de contenedores quemados. Entre las tardes del jueves y el viernes tuvieron que realizar siete intervenciones para sofocar diez incendios de recipientes de residuos urbanos situados en las calles Botánico Rivas Godoy y Andalucía de Petrer, y en distintas zonas del barrio de La Torreta y el ecoparque municipal de Elda. La mayor parte de los fuegos fueron provocados de madrugada y las pérdidas económicas ocasionadas oscilan en torno a los 4.000 euros.

Las fuerzas policiales siguen investigando unos hechos que comienzan a ser preocupantes por las pérdidas económicas, la contaminación ambiental, las salidas continuas de los bomberos y el riesgo de que las llamas se extiendan a viviendas con personas durmiendo en su interior. En los dos últimos meses han ardido ya setenta contenedores en diferentes municipios del Alto y Medio Vinalopó.

Este diario ya informó en marzo que el incendio de nueve contenedores durante un fin de semana en dos puntos distantes del extrarradio de Sax podría guardar relación con la oleada registrada desde mediados de febrero en Novelda, Villena, Elda y Petrer.

Todo comenzó con una acción planificada de una o varias personas que redujo a cenizas 36 contenedores de basuras, envases y papel situados en 16 puntos del casco urbano y partidas rurales de Novelda. Un acto vandálico que generó pérdidas superiores a los 12.000 euros. En esas fechas también prendieron fuego a tres contenedores de basura situados en el extrarradio de Villena.

No cabe duda de que se trata de incendios intencionados y premeditados. De hecho, en la extinción los bomberos suelen encontrarse con fuegos «muy vivos», lo que sugiere el uso de sustancias acelerantes. Cabe recordar que en Elda y Petrer cayó en enero una banda juvenil que llevaba, supuestamente, más de un año quemando contenedores, carros de compra y arbolado urbano. Los cuatro acusados, de entre 13 y 16 años, están inmersos en un procedimiento penal.