El Sindicato Profesional de Policías y Bomberos (SPPBL) ha denunciado la escueta plantilla con la que cuenta la Policía Local y lo hace a través de las numerosas quejas que se le han transmitido desde la sección sindical del Ayuntamiento de Aspe. En las reclamaciones se precisan «las lamentables condiciones laborales de los funcionarios que prestan el servicio». Ante esta situación se ha remitido un escrito a la alcaldesa, Mª José Villa, suplicándole que canalice y encauce una solución de forma inmediata.

En el escrito, el sindicato SPPBL asegura que «las diferentes reclamaciones, quejas, solicitudes y peticiones han sido vilipendiadas sin justificación alguna y se ha tratado a los funcionarios que las han hecho públicas, de los que usted es jefa nata (refiriéndose a la alcaldesa), de poco menos que mercenarios, niñatos, consentidos y privilegiados».

La situación que sufre el cuerpo de Policía Local, según el SPPBL, es «grave», a lo que añaden que «está a punto de producirse la mayor situación de caos vivida en la Policía de Aspe». Hablan de escasez de medios, de sobrecarga mental y física, y se asegura que «los agentes están obligados a mantener cubiertos tanto el servicio mínimo como la gran cantidad de eventos que se desarrollan en el municipio».

Asimismo, establecen una diferencia entre «policías de primera y de segunda». Argumentan desde el sindicato que el intendente y los inspectores, a pesar de tener conceptos reconocidos en sus retribuciones, como la dedicación y una mayor responsabilidad, ven limitadas sus funciones al cumplimiento de su horario de oficina, sin ninguna obligación operativa, lo que consideran «un agravio».

«No puede sostenerse un servicio que se gestiona de manera dictatorial y a fuerza de imposición donde los agentes y oficiales se ven obligados a doblar jornadas de trabajo continuamente, acumulando más horas consecutivas de las establecidas legalmente, a perder días de descanso por asignación de determinadas necesidades fuera de los turnos establecidos, a perder días de permiso que les corresponden en derecho, a estar disponibles permanentemente sin retribución alguna, a renunciar a la planificación de su vida privada y familiar por el mero hecho de ser Policía Local de Aspe» se subraya en el escrito del SPPBL a la alcaldesa.