El II Plan para la Igualdad de mujeres y hombres de Elda se marca como uno de sus principales focos de actuación la formación de los más pequeños para la erradicación del sexismo entre jóvenes y niños. El Consejo de la Mujer está dispuesto a trabajar a largo plazo y, en el análisis previo realizado para la redacción del plan, se establece que uno de los objetivos es organizar programas de educación que incentiven una garantía de cambio social a largo plazo y la eliminación de los roles de género y los estereotipos en la edades más tempranas.

En el texto que dio luz verde al plan se pone el acento en la cultura. En él se indica que «la ausencia de perspectiva de género en la programación cultural del municipio contribuye por tanto a mantener las percepciones sociales tradicionales respecto a los roles de hombres y mujeres».

Mujer y empleo

Elda cuenta con una población total de 53.248 personas (según los datos del INE de enero de 2015). El 51,21% son mujeres y el 48,79% hombres. Y a pesar de la leve superioridad numérica, los datos que arroja el informe de contextualización del Plan de Igualdad marca las distancias que existen entre los dos géneros, tanto en el ámbito laboral como en el social, tanto en el privado como en el público.

En el año 2015, el porcentaje de personas paradas en Elda con respecto a la población activa total ascendía al 21,43%, de las cuales el 12,74% eran mujeres mientras que el 8,69% eran hombres. Con base en la población activa en función del sexo, el desempleo entre población activa femenina afectaba al 25,52% mientras que entre la masculina el número de desempleados ascendía al 17,35%. «Todo ello sugiere que el desempleo se encuentra feminizado» se especifica en el documento. Una situación que se mantiene desde hace una década.

Así en la comarca del Medio Vinalopó se muestra que el número de hombres activos y ocupados es superior al de mujeres mientras que para el caso de las paradas e inactivas es superior que el de los hombres, especialmente entre las personas inactivas. También se observan una marcada distancia en los roles de género que asumen la mujeres y los hombres en los distintos sectores económicos de la ciudad.