El análisis del coste económico y laboral de la remunicipalización del servicio de grúa para la retirada, traslado y depósito de vehículos hace inviable que el Ayuntamiento lo reasuma por su elevado coste y por lo tanto se mantiene el proceso de contratación que se inició hace unas semanas. Si el ayuntamiento gestionase directamente de forma ágil y óptima de la retirada coches de las vías urbanas, principalmente por estar mal aparcados, la tarifa de arrastre de los vehículos se aumentaría. Ésta es la conclusión de los cálculos realizados en un informe de la Policía Local ante un posible proyecto de explotación municipal.
Un informe que el concejal de Seguridad Ciudadana, José Antonio Amat, encargó para conocer la estimación del gasto de la remunicipalización de este servicio antes de que venciese el plazo de la actual concesión.
El pliego de condiciones de la contratación del servicio de la grúa es por un coste máximo de 231.096 euros, correspondiente al periodo inicial de duración del contrato de dos años. Frente a este importe -que algunos grupos municipales como Izquierda Unida han considerado elevado-, que el ayuntamiento se hiciese cargo de él ascendería a 185.864, según el análisis. Una cifra que únicamente contabiliza el coste de seis nuevos empleados en un año y la compra del material necesario.
Pero también establece que con seis operarios y dos grúas no se daría el servicio que se ofrece en la actualidad. Por un lado bajaría su calidad y por otro, se debería subir la tasa que los conductores sancionados deben de pagar por el arrastre de su vehículos. Además con seis empleados la plantilla sería muy escuálida por atender a todas las necesidades y los turnos.
El estudio en el que se basa la decisión establece tanto el coste económico como el de recursos humanos que es necesario para realizar el servicio con unas garantías mínimas. En él se indica que sería necesario contar con dos operarios para la conducción de la grúa y el remolcado, durante 24 horas y siete días a la semana.
Con estos condicionantes el planteamiento sería contratar a ocho policias locales más y en el caso que estos no se pudieran emplear, sería preciso extraerlos de los trabajos de seguridad y vigilancia. Asimismo afectaría a los servicios extraordinarios así como a los permisos, libranzas y vacaciones de la plantilla de la Policía Local.
También se analiza el coste de los operarios de estas grúas. Contando con las nóminas de seis empleados y la ropa laboral, el Ayuntamiento debería desembolsar 134.000 euros anuales.
Por otra parte, en la actualidad, el ayuntamiento no dispone de grúas. Las que dejó la empresa arrendataria de la ORA, que con anterioridad realizaba el servicio, son viejas, obsoletas y nada útiles por lo que se deberían adquirir nuevos vehículos bien por el sistema de compra o de renting. Más de 51.000 euros costaría asumir dos nuevos vehículos, los necesarios para cubrir el servicio.
A este coste se le sumaría el alquiler de más grúas para los eventos ya que sólo dos grúas propias son insuficientes para acometer este tipo de actos como carreras o desfiles.
