Un hombre de 49 años y una mujer de 33 quedaron ayer en libertad con cargos tras ser detenidos en Aspe por, presuntamente, engañar y robar en sus domicilios a octogenarios, a los que pedían un vaso de agua para sustraer dinero u objetos de valor. Según la Guardia Civil, a los arrestados se les atribuyen ocho delitos de este tipo por el momento.

El modus operandi consistía en que la mujer tocaba a la puerta de una vivienda en la que sabía que vivía una persona de avanzada edad, a poder ser octogenaria, y para ganarse su confianza le hacía creer que era la nieta de alguno de sus conocidos.

Durante la conversación, les pedía un vaso de agua, en valenciano «gotet d'aigua», término que ha dado nombre a la operación, petición a la que la víctima accedía amablemente, y en el momento que se marchaba a la cocina la mujer aprovechaba para sustraer el bolso, joyas, tarjetas de crédito o cualquier otro objeto de valor que hubiera al alcance por la vivienda.

Gracias a la investigación, los agentes han descubierto por el momento hasta 5 delitos cometidos por esta mujer en casas donde residen ancianos, y no sólo de Aspe sino también de Xixona, de donde la autora proviene, aunque no se descarta la aparición de más posibles víctimas.

En algunas ocasiones, la mujer se hacía acompañar por su pareja, de 49 años, al que también se está investigando por su posible participación en otros hurtos cometidos por la provincia, además del robo de un coche en Vélez Blanco.