Nada ha podido hacer la veterinaria de Pinoso ni los expertos del Centro de Recuperación de Fauna por salvar la vida a una cría de jabalí que quedó atrapada en el interior de un agujero de unos 70 centímetros. Una cavidad que se dejó a ras de suelo y sin tapar en la pedanía pinosera de El Rodriguillo cuando se retiró un poste eléctrico. El jabato tendría entre dos y tres semanas y el técnico del Área de Medio Ambiente lo descubrió, por casualidad, cuando supervisaba unos trabajos de recuperación del enclave natural.

José Carlos Monzó calcula que llevaría dos o tres días atrapado sin leche materna y soportando las bajas temperaturas de la noche y madrugada. Cuando él lo extrajo todavía estaba vivo aunque muy débil, deshidratado y desnutrido. Pero finalmente ha muerto.