?Aunque la Congregación planteó cerrar las instalaciones en Villena porque el Asilo no se ajustaba a la ley de accesibilidad, finalmente, en el otoño de 2015 optó por mantenerlo abierto y llevar a cabo la rehabilitación y ampliación del inmueble. La sociedad villenense respaldó la iniciativa de la Congregación y a lo largo de 2016, asociaciones y distintos colectivos organizaron actividades encaminadas a recaudar fondos para sufragar las obras.