Los falleros se volcaron durante toda la noche en la colocación de los monumentos en las calles de Elda. Unas piezas que el domingo desparecerán devoradas por el fuego. La noche se presentaba larga para las nueve comisiones que debían tener terminadas a tiempo las fallas ya que hoy las visita el jurado encargado de otorgar los premios.

El único monumento de cartón piedra, que durante el día de ayer se erguía por completo fue la Falla Oficial de la Junta Central de Fallas. La plantá de éste se inicio el miércoles a las doce de la noche, minutos después de que finalizase el pregón que ofreció el presidente de la Federación de las Peñas Huertanas de la Región de Murcia, Juan Pablo Hernández .

La falla cuenta con un elemento central a modo de cabeza y en su tocado se han dibujado varios monumentos de la ciudad, la iglesia de Santa Ana y la Casa Consistorial, y en el remate, como si de la Sagrada Familia se tratase, se han colocado los escudos de las nueve comisiones y el de la Junta Central de Fallas. A su alrededor, el artista fallero, Federico Molinero, ha realizado una visión personal de los elementos más importantes de Elda desde sus distintas fiestas hasta sus orígenes, eso sí, sin olvidar la industria del calzado. La falla se denomina «Entre hermanas» y se han ubicado en ella las imagen de las dos falleras mayores, la adulta, Andrea Martínez y la infantil, Elia Bernabéu. Además no se ha olvidado de que las Fallas recibieron este año el galardón de la UNESCO como patrimonio de la humanidad.

Y aunque la plantá se inició de forma oficial ayer a las doce de la noche, sin embargo algunas comisiones debido a las dimensiones de su monumento comenzaron los trabajos previamente como la de Huerta Nueva, que lleva por título «Salvaje» y es del artista Joaquín Rubio.

Los trabajos fueron desiguales en los distintos distritos. Mientras en algunos casi toda la estructura a falta de los detalles más precisos estaban colocados a primera hora de la tarde, en otras esperaron a que los festeros dieran cuenta de las cenas a base de gachamigas para ponerse manos a la obra. Así, poco a poco, los bocetos que se presentaron en el mes de julio fueron cobrando vida.

Nueve comisiones plantan 18 fallas en los distintos barrios de la ciudad. A este elenco se suma una más la de la Junta Central en la plaza de la Constitución. La temática de cada una de ellas es muy dispar y predomina la imaginación y el buen humor. Incluso algunas de ellas dejan de lado la critica, un elemento esencial en este tipo de monumentos, y optan por una vertiente más solidaria y social.

Después de 80 años de tradición de estos festejos en la ciudad ya se ha creado un grupo de artistas locales que se dedican a aportar colorido a estas obras de arte efímeras y en los que algunas comisiones confían para poner en sus manos la construcción de su monumentos, tanto los más altos como los infantiles. Así, estas fiestas populares se han convertido en el germen de una nueva e incipiente industria en la ciudad, la de los artistas falleros.

La familia fallera vive hoy con emoción la elección del mejor monumento de 2017. El jurado calificador visitará todos los monumentos de la localidad, y no será hasta las siete y media de la tarde cuando se dé a conocer el fallo desde el Salón de Plenos del Ayuntamiento. Los nervios se apoderan de las falleras en el preciso momento que escuchan el nombre de su falla como ganadora de un premio.

Otro de los momentos que también se espera con emoción es la recepción a las Falleras Mayores de Valencia, que participarán en la Cabalgata del Ninot.

Premio Generalitat

Por otra parte, en la mañana de ayer el delegado del Consell en Alicante, Esteban Vallejo Muñoz, entregó a la presidenta de la Junta Central de Fallas de Elda, Isabel Villena, el estandarte del premio «Generalitat Valenciana»,un premio que se otorgará a la falla ganadora, que se conocerá durante la entrega de premios. Se trata de un galardón que se otorga este año por primera vez en todos los municipios de la Comunidad Valenciana donde se plantan monumentos. Está dotado con un premio de 1.000 euros.