El proyecto para la captación y canalización de aguas pluviales de Novelda ha comenzado a ejecutarse esta semana para poner fin a las frecuentes inundaciones de viviendas, locales, aparcamientos y negocios de la zona baja del casco urbano cuando se producen lluvias torrenciales. Se trata de una actuación «prioritaria» para el Ayuntamiento, con un plazo de ejecución de diez meses y un presupuesto superior a 1,5 millones de euros. Una inversión sufragada por la Conselleria de Medio Ambiente, que desarrollará el proyecto elaborado y costeado por el Consistorio noveldense.
Las obras han comenzado por el colector norte. Son 1.237 metros lineales de tuberías que discurren desde la calle Poeta Luis Pérez Beltrá hasta Cura González para acabar en el río Vinalopó.
Una vez concluida la canalización en este primer colector se iniciará la obra del segundo, que se prolongará desde Emilio Castelar hasta el río en un tramo donde la afectación vecinal será mayor, obligando al corte de calles y cambios de sentido en la circulación. En este caso, tanto el alcalde Armando Esteve como el concejal de Calidad Medioambiental, Francisco Cantos, han señalado que se intentará que «los tramos abiertos por la obra sean lo más pequeños posible». De este modo pretenden evitar molestias a los ciudadanos ya que se «trata de una actuación de envergadura que tendrá una repercusión importante en el día a día de la ciudad».
Una conducción de 57 años
El proyecto de canalización y conducción pluvial fue aprobado en 2013 por la Conselleria de Hacienda en sustitución de la obra de un nuevo centro polideportivo, incluido en el Plan Confianza, que no llegó a construirse por incumplimiento del contratista.
La actual obra, que sustituirá las conducciones unitarias actuales que datan del año 1960, permitirá la separación en la recogida de las aguas pluviales y fecales. Para ello se van a construir dos colectores.
El primero recogerá el agua de lluvia de cuatro cuencas rurales que ocupan una superficie de casi 700.000 metros cuadrados y que, según el estudio hidrológico, pueden recibir un caudal de hasta 1.384 metros cúbicos de agua por segundo. El otro colector, que sigue la línea de las calles Emilio Castelar, Travesía, Sargento Navarro y Médico Sala hasta el río, tendrá más de 1.000 metros de tuberías. Su función será recoger el agua de diez cuencas urbanas, con un área total de 662.016 metros cuadrados, y tendrá capacidad para recibir 12.797 metros cúbicos por segundo. Todo ello encaminado a poner fin a las inundaciones.
