La creación de albergues que den cobijo a los peregrinos es uno de los elementos fundamentales a la hora de elegir un camino por el que transitar. El de Sureste en sus etapas en la provincia cuenta con cuatro: el del IVAJ en Alicante, el de Orito, el de Novelda y el municipal de Petrer.
Sin embargo, quienes llegan a Villena se encuentran sin lugar donde pernoctar. Algunos siguen hasta Caudete donde se ha habilitado uno y otros deciden reservar habitación en el hotel de Villena o en algün alojamiento rural.
Conseguir un albergue que dé cobertura al número de peregrinos, que cada vez es mayor, es una de los retos que se ha marcado las Asociación del Camino del Sureste de Villena. Después de ocho años de negociaciones con el Ayuntamiento todavía no lo han logrado pero no cejan en su empeño.
El presidente del colectivo villenense, Pepe Marco, señala que «se nos han ofrecido varios espacios pero ninguno reúne las condiciones necesarias y por ello siguen buscando otras posibilidades». Marco apunta que «vemos cada vez más peregrinos transitar por las calles de la ciudad» y añade que «es posible que entre tres y cuatro de media a la semana crucen Villena» pero no se pueden quedar a dormir. Deben seguir su marcha a Caudete, donde la asociación del municipio albaceteño ha conseguido un albergue con muy buenas condiciones.
Uno de los obstáculo para quienes eligen esta ruta es la falta de albergues a lo largo del camino. Por ello, los distintos colectivos editan amplias guías en las que dan la información oportuna al caminantes sobre los lugares dónde descansar, dónde dormir o dónde pueden lograr la información precisa sobre el lugar en el que están,
Además a las asociación de amigos del camino recurren los que van a hacer el Camino sea la ruta que sea para conseguir la credencial. Asimismo ofrecen recomendaciones sobre las distintas opciones para llegar a la catedral del Santo, los kilos a llevar en la mochila, el calzado más adecuado y qué hacer al llegar a Santiago de Compostela.
Cada peregrino que decide emprender el Camino de Santiago lo hace por diferentes motivos. Se trata de un camino espiritual en el que caminantes de todo el mundo ansían llegar a Santiago de Compostela, donde se veneran las reliquias del apóstol Santiago y se consigue la perseguida concha del peregrino.
La experiencia se puede vivir desde el carácter más espiritual y de superación hasta el de la diversión y el del deporte. El peregrino sólo precisa donde descansar y seguir las flechas amarillas, por eso las asociaciones se afanan no sólo en darlo a conocer sino también en que esté en perfecto estado de revista y hacerlo accesible para cualquier persona. De hecho hace unas semanas se inauguró el primer albergue en Castilla para personas con escasa movilidad.
