Los campos municipales de fútbol Santa Bárbara de Monóvar se han convertido en un "pozo sin fondo" por las continuas roturas y desperfectos que se suceden tras su inauguración. El concejal de Deportes, Salvador Giménez, asegura que "desde el mes de septiembre de 2016, la concejalía ha invertido 30.000 euros en diversas actuaciones para subsanar las constantes deficiencias que vienen aflorando desde su construcción".

La mayoría de estas actuaciones, según el edil, se derivan "de la mala construcción y las malas calidades de los materiales empleados, la falta de previsión e incluso de posibles negligencias y carencia de supervisión mientras se erigía este complejo deportivo".

Salvador Giménez sostiene que "tras la inauguración de los campos de fútbol se han ido sucediendo constantes reparaciones, especialmente las derivadas de desprendimientos de tierra y asentamientos, sobre todo, después de lluvias, que han supuesto un importante coste económico y técnico".

Uno de los hechos más graves que denuncia Giménez es "la superficie de césped artificial de ambos campos, ya que faltan los estratos fundamentales como es el de la capa de zahorra, de todo ello se demuestra la falta de previsión con este tipo de construcciones".

Por último el concejal de deportes recuerda que "en su día ya advertimos que quizá, ni era el mejor lugar, ni era el complejo idóneo para nuestro municipio".