El Ayuntamiento de Villena ha llegado a un acuerdo extrajudicial con la empresa concesionaria del servicio de agua potable y el alcantarillado para evitar ir juicio y poner fin a los distintos contenciosos que ambas partes mantenían, según adelantó el alcalde de la ciudad, Javier Esquembre.

Desde hace años la concesionaria del servicio viene reclamando al Ayuntamiento el pago de 1.570.000 euros por gastos de energía eléctrica, así como un aporte económico municipal alegando que la concesión es deficitaria. Por otro lado, el consistorio solicitaba a la empresa el pago de la deuda por el canon del servicio de agua establecido en el pliego de condiciones y que asciende a un millón de euros, así como 300.000 euros por las obras pendientes para mejorar el alcantarillado y las acometidas del agua.

El alcalde de Villena, Javier Esquembre, explicó que la empresa adjudicataria abonará al Ayuntamiento 37.866 euros, según el acuerdo alcanzado, «aunque en agosto se procederá a la liquidación del servicio». Esquembre valoró como «muy positivo el acuerdo para ambas partes porque evita juicios y costes».

El Ayuntamiento está obligado a finalizar el contrato con la empresa en agosto de 2017, diez años antes de lo previsto, según una sentencia de noviembre de 2014 del Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana.

Cabe recordar que en 2007 una sentencia judicial anuló la adjudicación del servicio a la UTE formada por Aguas de Valencia y Viarsa que tuvo lugar en 2004 con la socialista Vicenta Tortosa en la Alcaldía, otorgando la concesión a la empresa Aqualia, que quedó segunda en la adjudicación. Sin embargo la corporación presidida por la popular Celia Lledó no actuó con celeridad y el cambio de concesionaria se produjo en 2012.

Por otro lado, el alcalde adelantó que están elaborando los pliegos de condiciones para una nueva licitación del servicio, que se llevará a cabo en mayo.