Dos hermandades, la de San Juan y la Samaritana y la Dolorosa, participaron en la primera de las procesiones de la Semana Santa aspense. El cuadro escultórico de Jesús y la Samaritana fue el primero en aparecer por las calles tras su salida de la Basílica del Socorro. Más tarde le llegó el turno a la Esperanza Macarena. La imagen, una talla que data de los años 60, salió de la iglesia rodeada de flores, en su trono, y fue llevada a hombros por cincuenta miembros de la cofradía de la Dolorosa, Soledad, Esperanza Macarena y Ángel de la Resurrección con sus túnicas negras y sus capas blancas.

La del Lunes Santo es una de la procesiones más recientes cronológicamente del extenso programa de actos que conforma la Semana Santa de Aspe, que cuenta con una tradición de más de 400 años. Efeméride que celebra este año.

La de Jesús y la Samaritana es una procesión sencilla pero que cuenta con centenares de devotos que se apostaron en las calles del recorrido a pesar del descenso de las temperaturas que se experimentaron al esconderse el sol.

La de ayer se vivió con una mayor intensidad ya que las imágenes no pudieron salir a la calle el año pasado debido a la lluvia. Por fin esta estación de penitencia pudo cumplir con su tradición y procesionar.

La procesión inaugural, que se inició a las nueve de la noche data de 1979 cuando llegó a la ciudad el conjunto escultórico. Su autor es José María Sánchez Lozano, de Pilar de la Horadada, y el trono lo realizó el escultor Mario Álvarez de Aspe en 2004.

A las 21 horas de hoy partirá desde la parroquia del Buen Pastor la procesión denominada «La Oración del Huerto». Participan en ella las hermandades: la Oración del Huerto, Nuestra Señora del Dolor y la Agonía, Santas Mujeres Piadosas y María al Pie de la Cruz.