Ha sido un atraco muy extraño y de sorprendente desenlace el que se ha producido estos días entre Hondón de las Nieves y Aspe. Un atraco que ha finalizado con el presunto autor entre rejas y la víctima denunciada por un supuesto delito de conducción bajo los efectos de bebidas alcohólicas.

Los hechos se inician en Hondón de las Nieves cuando un vecino le pregunta a otro si lo podía llevar a la localidad de Aspe porque tenía que hacer unas gestiones. Ambos se conocían así que el propietario del coche accedió. Pero, una vez que el acompañante montó en el turismo sacó del bolsillo una navaja de gran tamaño con la que lo amenazó. Le exigió que le entregara todo el dinero que llevaba encima si no quería que lo «pinchara». Al parecer, sabía que la víctima acababa de cobrar una importante suma de dinero en efectivo por unos trabajos que había realizado durante las últimas semanas.

Como se encontraba conduciendo y no tenía posibilidad alguna de huir ni defenderse frente a la amenaza de ser acuchillado, accedió a entregarle el sobre en el que llevaba todo el dinero. Continuaron entonces la marcha en dirección Aspe pero, aprovechando que el atracador se había descuidado y estaba contando tranquilamente los billetes, la víctima dirigió el vehículo hasta el lugar donde se encuentra ubicado el cuartel de la Guardia Civil de Aspe. Una vez llegado a la altura del recinto detuvo bruscamente el coche, justo en medio de la carretera, y salió gritando a la carrera para pedir ayuda a los agentes que se encontraban realizando las tareas de vigilancia en el puesto. Éstos lo socorrieron inmediatamente al tiempo que observaban cómo su acompañante dejaba caer de forma disimulada un objeto debajo del vehículo. Era la navaja, que fue intervenida mientras se procedía a la detención del presunto autor del robo con violencia frustrado. Una vez en el interior del cuartel los guardia civiles realizaron diversas gestiones y pudieron averiguar que se trataba de un conocido delincuente, con numerosos antecedentes tanto en Hondón de las Nieves como en otros municipios de la comarca. Unas horas después era puesto a disposición del Juzgado de Instrucción de Novelda y enviado a prisión provisional sin posibilidad de presentar fianza.

Pero la víctima tampoco quedó impune. Al tomarle declaración en el cuartel para que explicara todo lo que había sucedido los agentes se percataron de que estaba ebrio. Requirieron entonces la colaboración de la Policía Local para practicarle el test de alcoholemia. La patrulla que se dirigió al cuartel pudo constatar con el etilómetro que, efectivamente, superaba el índice máximo de alcohol, por lo que fue denunciado en el mismo instante por un supuesto delito de conduciendo bajo los efectos de bebidas alcohólicas.

Un extraño suceso el ocurrido estos días entre Hondón y Aspe.