El día en el que La Purísima resplandece en Monforte del Cid. Ese día fue ayer y la «Villa Real, Leal y Fiel» lo celebró paseando a su patrona en procesión, a hombros de los Contrabandistas y custodiada por los Cristianos, para dedicarle la jornada más especial, sentida, apasionada e intensa de las fiestas de Moros y Cristianos de 2016.
Desfiles, guerrillas, arengas, embajadas, pasacalles, misas y fuegos artificiales. Y todo ello desde las ocho de la mañana hasta el filo de la medianoche en un día de diciembre que el sol y las tres comparsas se encargaron de calentar.
«Monforte en tu canto quiero abondar. /Virtuosos eran tus antepasados, /y en honor a ellos con sentimiento, /con sentimiento te quiero cantar», dice el Himno a la Purísima que la Coral Monfortina interpretó magistralmente en la Misa Solemne a la que siguió el Desfile General de Comparsas. Este acto comenzó a las 12.30 horas y finalizó sobre las 15, se desarrolló con cálida temperatura y mucho público en la calle y, como suele ser habitual, fue aprovechado por las familias para mostrar la gracia festera de sus bebés. La hija de la alcaldesa María Dolores Berenguer fue una de ellas. Alma completó su primer desfile con tres meses de vida. Vestida de Contrabandista, con la escuadra de las Serranillas, arrancó las lágrimas de su madre cuando la vio pasar a ritmo de pasodoble en un acto que salió «perfecto». La decisión de la comisión de fiestas de encargar la coordinación a tres personas de cada comparsa fue un acierto.
Y a las 21.10 horas llegó el momento más esperado cuando la resplandeciente imagen de La Purísima cruzó el pórtico de la iglesia ante la expectación de miles de fieles que la esperaban. Los festeros de las escuadras Moras, Cristianas y Contrabandistas iniciaron entonces el paso con el gesto grave y los trajes de gala. Y de nuevo visitó la patrona una población que recorrió por vez primera el 8 de diciembre de 1769. Y solo quedan tres años para el 250 aniversario.
