La representación del «Tractat d´Almirra» cumplió ayer cuatro décadas en escena. El rey Jaime I, «el Conquistador» rey de Aragón, de Mallorca y de Valencia, conde de Barcelona y de Urgel y señor de Montpellier selló la paz con el infante Alfonso. que mas tarde fue el rey de Castilla, apodado «el Sabio», en el escenario dispuesto frente a la fachada de la iglesia.

La representación de la alianza entre los dos reinos de la península logró un mayor dinamismo que años anteriores. Los textos declamados de memoria por los interpretes, en su mayoría vecinos de la pequeña población alicantina de unos 400 habitantes, son un tratado de estrategia palaciega a fin de evitar la guerra. Un pacto que después de duras negociaciones cierra Alfonso X, el 26 de marzo de 1244, con Jaime I de Aragón, su futuro suegro, estableciendo así las fronteras entre ambos reinos.

La función, una exaltación de la época histórica que sentó las bases del Reino de Valencia, se ha consolidado y evolucionado en estos cuarenta años tanto en la puesta en escena como en la música, la iluminación y la teatralización. Numerosos colaboradores han dado cada vez más calidad escénica al acto cultural.