Agentes de la Policía Nacional han detenido a siete personas por delitos contra la salud pública y pertenencia a organización criminal. Entre ellos figura un vecino de Petrer de 30 años y otro de Elda, de la misma edad, del que se sospecha que pudiera tratarse del cabecilla de esta red de narcotráfico a gran escala, con conexiones en Marruecos, que llevaba más de tres años operando.

Todos los arrestados se encuentran en prisión y, según se desprende de las investigaciones realizadas por la Brigada Provincial de la Policía Judicial de Madrid, se valían de una infraestructura legal de empresas dedicadas al transporte de mercancías, con camiones de gran tonelaje, para trasladar grandes cantidades de hachís -en habitáculos ocultos en las góndolas- desde Marruecos hasta España y, posteriormente, a Reino Unido y Holanda.

La investigación se ha llevado a cabo en dos fases, tras las cuales se ha conseguido desarticular la ramificación española de un grupo delictivo al que la Policía comenzó a investigar hace siete meses.

Los camiones eran «preparados» en una nave industrial de Onil que contaba con una «zona de prácticas» donde ideaban nuevas formas para ocultar la droga como, por ejemplo, una piedra de 11.000 kilos con perforaciones realizadas para introducir el hachís.

En la operación también ha colaborado la Brigada Provincial de Policía Judicial de Alicante.