Nadie se lo podía creer, la lluvia volvía a jugarle una mala pasada a la Entrada Cristiana de los Moros y Cristianos de Elda. Minutos antes del inicio del desfile empezaba a llover y los integrantes de la comparsas de Contrabandistas, encargados en 2016 de la apertura de la Entrada se refugiaban bajo las cornisas de la Plaza Castelar, punto de inicio de este gran desfile. La Junta Central de Comparsas anunciaba a través de las redes sociales que la Entrada se atrasaba hora y media.

A las siete y media en punto de la tarde el desfile comenzó con el paso de Asociación Musical Santa Cecilia de Elda y el embajador cristiano, Isidro Juan Gallardo, que precedía el paso de los estandartes de las comparsas, a lomos de un caballo. La apertura de la Entrada Triunfal Cristiana la organizó la comparsa de Contrabandistas con un boato de corte serraniego dejando de lado los grandes volantes o trajes de flamenca más característicos del estilo sevillano.

En los numerosos ballets que la comparsa presentó predominó el rojo intenso con algunos toques de negro. La lucha de navajas, las carretas tiradas por bueyes, los grandes claveles reventones, el fuego de un rojo intenso y una carroza en la que sus integrantes tocaban el cajón flamenco marcaron un espectáculo inicial que ensalzaba las señas de identidad de los Contrabandistas como en la tarde del viernes sus pequeños comparsistas lo hicieron en el Desfile Infantil.

Su capitán y abanderada cerraron el boato y dieron paso a la comparsa. Con sus trajes en tonos blancos y tierra arrancaron los aplausos del numeroso público apostado en las calles del recorrido. Mientras que la abanderada optó por los volantes, Sergio garcía, el capitán, optó por una chaquetilla brocada y un capa bordada. La comparsa cuenta con dos abanderadas en 2016, las hermanas Marina y Paula Boix García.

Tras la capitanía una multitud de escuadras llenaron de alegría el recorrido con pasodobles de tonos andaluces como Ecos Españoles o Campanera.

La potencia de las marchas cristianas llegaron con la comparsa de caballeros de la cruz, la de Cristianos, que impusieron la fortaleza a la Entrada. Con los acordes de Caballeros de Navarra o Jessica, las tropas de la cruz avanzaron que, a pesar de la derrota sufrida en la Embajada de la mañana por el bando moro, todavía le queda mucho que decir.

Otra de las piezas que esta comparsa eligió para su desfile fue la composición Creu Daurà de Francisco Valor, que el jueves fue el encargado de iniciar las fiestas de Moros y Cristianos de Elda dirigiendo el pasodoble «Idella»

Su capitán y abanderada -Maite Valero Sales y Miguel Ángel Valero Juan (padre e hija)-también optaron por el blanco, en este caso combinado con dorado para el traje del desfile que es el de gala del bando de la cruz.

Entre las escuadras de esta comparsa estaba de enhorabuena la llamada Don Pelayo, que en 2016 cumple su trigésimo aniversario. La cristiana está muy implicada en la fiestas y ahora, sus hijos comienzan a tomar el relevo de los fundadores para seguir con ésta, que lleva el nombre del monarca que inició la Reconquista.

Con el eco de las marchas cristianas de resonando, llegaron los Piratas y con ellos la fantasía entró en el recorrido del desfile. Su capitán y abanderada -Pablo Juan Sánchez y Lucía Romero Atienza- se decantaron por el negro y el plata para sus trajes. Calaveras, tibias y mucha imaginación imprimieron las escuadras de esta comparsa a su desfile. Los bucaneros eligieron dentro del repertorio musical, los pasodobles más clásicos de este tipo de festejos como Fiestas en Benidorm.

Del amarillo y el negro de los Piratas se pasó al blanco y negro de los Estudiantes. Desde la plaza Castelar, algunas de sus escuadras arrancaron con el popular pasodoble Amparito Roca. Cerró la comparsa el bloque que comandaba el alcalde de Elda, Rubén Alfaro. La tribuna de autoridades se levantó en pleno cuando la primera autoridad pasó delante de ella. El capitán y abanderada -Andrea Olcina González y Alejandro Jover Olcina- también lucieron trajes blancos con tonos plata. Un color que este año han eligido muchas de las capitanías.

Los Zíngaros pusieron punto y final al bando cristiano. Ésta comparsa de origen eldense llenó las calles de Elda de gran colorido y sonido con sus cascabeles y panderetas. El mogollón zíngaro dio su toque particular a la Entrada a ritmo de samba.

Su capitán y su abanderada -Irene Ruzafa Martínez y Antonio Ruzafa Lorenzo (padre e hija)- siguiendo las características de su comparsa eligió los colores rojos negros y dorados para arrancar los aplausos del numeroso público que abarrotaban las calles.

Tras el bando cristiano abrió el moro la comparsa Huestes del Cadí y le siguieron las de Musulmanes, Marroquíes y Realistas. Mañana será el turno de estas comparsas que lucirán sus mejores galas en la majestuosa Entrada Mora.Está previsto que el desfile se inicie a las 18,00 horas y será la comparsa Huestes del Cadí la encargada de realizar la apertura de las tropas de la media luna.

Más de 5.000 festeros con diversos trajes que aportaron colorido al desfile y sus respectivas bandas de músicas ofrecieron el gran espectáculo que sólo los Moros y Cristianos son capaces de llevar a las calles de la ciudad. Tras cinco horas de pasacalles, la Entrada finalizó pasadas las 12 de la noche. La noche todavía era larga para que la fiestas siguiese en la calle y los distintos cuartelillos por parte de los más jóvenes.

A pesar de las gotas de lluvia que retrasaron el inicio del desfile, las altas temperaturas fueron la tónica durante todo el día. Una climatología más propia de los meses de verano que de junio.