La Generalitat Valenciana tiene previsto invertir más de un millón de euros en renovar la estación depuradora de aguas residuales (EDAR) ubicada en Villena, «con el fin de mejorar la calidad del caudal que se vierte a la acequia de El Rey», afirmó el alcalde de la localidad, Javier Esquembre.

El alcalde señaló que con la inversión se remodelarán el 90% de las actuales instalaciones para que la estación sea más eficiente energéticamente, «y el Ayuntamiento negociará con la Confederación Hidrográfica del Júcar para incrementar los usos del caudal, con el fin de que si las aguas tienen los niveles adecuados, se siga utilizado por la Comunidad General de Regantes para el riego de cultivos, como caudal ecológico de la acequia del Rey, y además para uso municipal para el riego de parques y jardines».

La Generalitat Valenciana está redactando el proyecto de mejora de las instalaciones, demandadas desde hace más de una década por la población.

Tal y como adelantó el alcalde, el Ayuntamiento aportará una serie de consideraciones al proyecto como la mejora de la eficiencia energética de la planta a través del incremento de placas solares, así como «habilitar una zona preventiva, una especie de tanque con sensores, encaminada a que en el caso de que llegaran a las instalaciones aguas contaminadas, por vertidos incontrolados industriales, la depuradora no se paralice, como ha sucedido en otras ocasiones», explicó Javier Esquembre.

La estación depuradora recoge las aguas fecales de Beneixama, Cañada, Campo de Mirra y Villena. En el año 1999 los agricultores ya utilizaban el agua del EDAR para regar cultivos, no obstante, la actividad se paralizó tras detectarse en las analíticas altos niveles de metales pesados así como de bacterias. En 2013 se retomó esta práctica tras comprobar que el agua de la depuradora cumplía con los parámetros de calidad que exige la ley.

El alcalde adelantó que también se prevé la creación de un tanque de tormentas en la zona de Las Fuentes para evitar que se aneguen las viviendas ubicadas en esta parte del casco urbano con las lluvias torrenciales, «puesto que los bombeos que se llevan a cabo no son suficientes».