El alcalde de Petrer, el socialista Alfonso Lacasa, y el presidente de la Unión de Festejos San Bonifacio, Mártir, el estudiante Vicente Escolano, han coincidido en calificar con un «muy positivo» el balance de las fiestas de Moros y Cristianos que finalizaron el lunes. Ambos afrontaban su primera celebración en sus respectivas responsabilidades y lo hacían ilusionados, «pero también con respeto y preocupación para que todo saliera bien y los festeros, vecinos y visitantes disfrutaran al máximo».

Vicente Escolano está satisfecho con el resultado de los cinco días pero el próximo año quiere impulsar la participación en los actos de arcabucería. «Es uno de los objetivos que nos hemos marcado, además de mantener el alto nivel que ya tienen los Moros y Cristianos de Petrer», ha indicado reconociendo que los boatos ha sido lo que más le ha emocionado. «Ver en la calle, a pesar de los pesares, a tantas personas implicadas en los boatos y mostrando tanta felicidad ha sido impresionante», subraya.

También Lacasa está muy satisfecho de sus primeras fiestas como alcalde. «Nos ha acompañado un buen tiempo y muchos visitantes que han disfrutado», ha indicado extendiendo su agradecimiento a los festeros, a la Unión de Festejos, a su presidente y a la edil Irene Navarro por «la gran organización y empeño que ha permitido tener unas fiestas maravillosas». Tampoco se ha olvidado de las capitanías, a las que ha trasmitido su enhorabuena «porque con su elegancia y buen hacer han dado el toque de distinción». Este año han acudido a Petrer la consellera de Justicia, Gabriela Bravo; el secretario territorial de Turismo, Francesc Colomer, así como alcaldes y ediles de la comarca. Tampoco se han producido incidentes destacables más allá de un conato de pelea en la noche del jueves. En este sentido la labor de prevención de la Policía ha sido determinante.