El cielo de la tarde de ayer en Biar se llenó de pólvora y el estruendo de los arcabuces anunció el final de las fiestas de Moros y Cristianos, el momento de la despedida de la Patrona la Mare de Déu de Gracia, que desde la iglesia parroquial fue trasladada hasta el santuario.

A las siete de la tarde el capitán de la comparsa de Blanquets, con el primer disparo de arcabuz inició la subida al santuario de la Patrona. Tras él los arcabuceros de las siete comparsas: Blanquets, Blavets, Estudiants, Maseros, Moros Vells, Moros Tariks y Moros Nous.

Después, las marchas procesionales comenzaron a sonar en la plaza de la Constitución al paso de las comparsas. Así la imagen de Nuestra Señora de Gracia salió del templo parroquial escoltada por la escuadra oficial de la comparsa de Moros Nous. Tras la llegada de la Virgen al santuario los capitanes de las siete comparsas hicieron traspaso de las banderas a los festeros que las ostentarán hasta el día de San Vicente del próximo año. Así, la comparsa de Maseros inició los actos del 75 aniversario de su formación con la interpretación del pasodoble «Maseros de Biar».