La comparsa de Labradores de Villena se quedará sin poder organizar verbenas en el patio de su sede social el próximo verano.
La medida se desprende del acuerdo adoptado por el Ayuntamiento en el que se limita la actividad musical en la sede de la comparsa de Labradores al interior del inmueble.
El pasado mes de agosto un grupo de vecinos denunció los problemas de ruido que sufrían por las actividades que se desarrollaban en el patio de la sede social de los Maseros en los meses de verano. Entonces alegaron que el ruido impedía el descanso.
El acuerdo municipal viene avalado por una auditoría acústica realizada en la sede de la comparsa y en la que se establece que las actividades musicales se deberán realizar en el interior de las instalaciones, no superarán los noventa decibelios y finalizarán a las diez de la noche.
La portavoz de Los Verdes, Catalina Hernández, reconoció que el tema de la contaminación acústica y su regulación «es muy controvertido. Por este motivo, el equipo de gobierno quiere mantener reuniones con vecinos, comparsas y Junta Central de Fiestas, con el fin de llegar a un consenso que permita el derecho al descanso con el desarrollo de actividades festivas al aire libre durante el verano».
El objetivo es llegar a una solución antes del inicio del verano, para regularizar la realización de eventos en el exterior no sólo de las sedes de las comparsas de Moros y Cristianos, sino también en espacios públicos como la plaza de Santiago o la plaza Mayor que en los meses estivales son utilizados para el desarrollo de actividades culturales y musicales por parte del Ayuntamiento.
La concejala de Los Verdes insistió en es necesario definir los eventos y lugares donde se permita llevar a cabo actividades al aire libre -atendiendo a las tradiciones o costumbres en alusión a las verbenas que organizan las comparsas durante los Moros y Cristianos- y otros donde no debe permitirse. Así, subrayó en que el problema de la contaminación acústica no es sólo de la comparsa de Labradores, sino que también otras entidades cuyas sedes sociales están ubicadas en el casco antiguo provocan molestias a los vecinos, incluso apuntó a que el Ayuntamiento, en ocasiones, incumple la normativa acústica en la organización de eventos.
