Los problemas surgidos en los últimos años para conseguir que las aguas del Júcar aliviasen la histórica sequía que padecen las comarcas alicantinas responde, según el diputado socialista David Cerdán, a una «mano negra que en la última etapa de gobierno del Partido Popular trató de boicotear la llegada de los aportes hídricos del trasvase del Júcar a los campos del Vinalopó, l'Alacantí y la Marina Baixa». Para el portavoz de la comisión de Medio Ambiente de las Cortes Valencianas «desde el PP se ha boicoteado sistemáticamente la llegada de agua y se han traicionado los intereses de los agricultores, los regantes y las poblaciones afectadas». En este sentido David Cerdán aseguraba ayer, ejerciendo de máximo responsable de los socialistas alicantinos, que «el tiempo pone al final a cada uno en su sitio y, en el caso de los populares, se ha demostrado que su discurso de "agua para todos" estaba en realidad vacío de contenido y sólo tenía un fundamento electoralista».
Él cree que ahora, con el nuevo Consell de PSOE y Compromís, se están dando los pasos adecuados para desbloquear este delicado asunto. «Las vías de diálogo están abiertas -asegura- y nuestro objetivo es que el agua llegue allí donde se necesita pero a un precio asequible para el agricultor».