El Ayuntamiento de Aspe demandará por vía penal a la empresa concesionaria de la recogida de basuras de Callosa de Segura si finalmente se demuestra, tal y como en principio apuntan todos los indicios, su supuesta responsabilidad en el vertido de 12 toneladas de residuos urbanos arrojados, en la madrugada del pasado lunes, en un paraje natural de Aspe próximo a la carretera de Elche.
La Policía Local y el Seprona han abierto diligencias para esclarecer los hechos y, tan pronto como la investigación concluya, el Consistorio aspense emprenderá acciones legales como acusación particular. Así lo indicó ayer el alcalde, Antonio Puerto, de EU, tras informar de que la recogida de la montaña de basura con una pala excavadora y su posterior traslado en un camión al vertedero de Elche ha costado al Ayuntamiento 600 euros.
También el alcalde y el concejal de Servicios, Caralampio Díez, solicitaron ayer informes a la planta de tratamiento de residuos de Villena, la que gestiona Vaersa, para comprobar la cantidad de basuras procedentes de Callosa de Segura que se depositan en ella a diario. De este modo pretenden averiguar si uno de esos camiones se desvío de su ruta para cometer una acción que los regidores aspenses han calificado de «atentado medioambiental». Con el mismo fin han solicitado los datos de GPS de toda la flota de vehículos de la empresa concesionaria de Callosa para hacer un rastreo de las rutas realizadas por todos los camiones.
