El barrio del Rabal vive inmerso en pleno medievo con las fiestas que celebran en el mes de marzo y que son una gran proyección turística del centro histórico de Villena.

Las bodas en el castillo de la localidad son uno de los atractivos de este barrio que se engalana como si de una festividad de los siglos XII y XIII se tratase. Uno de los enlaces más esperado fue el de los ciudadanos chinos Hua Chen y Yuheng Zhao, que sellaron su unión junto a un nutrido grupo de amigos vestidos con atuendos de la época medieval y con el acompañamiento de los vecinos del barrio más antiguo de Villena. Otras tres parejas han elegido la fortaleza local como el mejor lugar para rubricar su amor.

A lo largo de la jornada de ayer, las sinuosas calles se llenaron de visitantes tanto de poblaciones cercanas como de turistas extranjeros dispuestos a contagiarse del regreso al pasado en el que se imbuye la ciudad. También en la jornada de hoy -en la que finaliza el Mercado Medieval- se esperan miles de visitantes y, para ellos, la asociación de vecinos de este barrio ha preparado multitud de actividades y de teatralizaciones.