El Ayuntamiento de Villena mostró ayer su rechazo a que la planta de residuos sólidos urbanos ubicada en la localidad continúe recibiendo basura procedente de la Vega Baja a partir de marzo, después de que el Consell autorizara el pasado mes de septiembre la entrada a Villena de residuos de municipios del sur de la provincia por un periodo de seis meses. El municipio adoptó esta postura tras la nueva Comisión de seguimiento de la planta de residuos de Vaersa, que se celebró ayer y en la que participó el director de Vaersa, Vicent García.

Como se recordará, la Generalitat aprobó en septiembre del pasado año el traslado de 30.000 toneladas de residuos de la Vega Baja a la capital del Alto Vinalopó, tras la clausura del vertedero de Crevillente. En principio por un plazo máximo de seis meses. Además, el Consell se comprometió a adoptar medidas para paliar los problemas de mal olor que padece Villena, como incrementar la plantilla de Vaersa o la instalación de sensores para conocer el origen del hedor. Sin embargo, estas medidas tampoco se han implementado.

Así las cosas, el alcalde de Villena, Javier Esquembre, afirmó que «la población ha sido muy solidaria hasta ahora, pero consideramos que se deben buscar otros lugares para depositar la basura de la Vega Baja». Por ello, el primer edil subrayó que el Ayuntamiento solicitará al consorcio de basuras del plan zonal al que pertenece la planta de Villena que revoque el acuerdo adoptado hace dos años, en el que se aprobó aceptar basura de fuera del plan zonal, «motivo por el que el Consell autorizó el pasado mes de septiembre la llegada de residuos de la Vega Baja a la planta villenense» explicó el alcalde.

Además, en la comisión se dio cuenta de que el Consell está incumpliendo los compromisos adquiridos con la población, al no haber implantado las medidas encaminadas a paliar el hedor. De hecho, en los últimos meses los episodios de mal olor son más frecuentes en la población. Un problema que podría estar relacionado con el incremento de residuos en las instalaciones municipales, ya que actualmente se vierten unas 50 toneladas de basura procedente de la Vega Baja, frente a las 30 toneladas de residuos por día de los primeros meses.