Tras los peores años de la crisis económica en los que los bancos de alimentos no parecían dar abasto a la demanda de las numerosas familias que hasta ellos llegaban, ahora parece que el número que acude a ellos se ha estabilizado, según se indica desde Cruz Roja. Por su parte, desde Cáritas Interparroquial, su presidente Juan Carlos Pastor, cifró el leve descenso de usuarios demandante de alimentos en un 20%. Pero se mantiene una alta la necesidad de muchas familias. V. P.