La Policía Local de Novelda va a contar con un nuevo «compañero» en sus tareas de protección de la uva de mesa frente a la acción de los ladrones durante la recolección. A partir de ahora la vigilancia dejará de ser exclusivamente terrestre y abarcará también el espacio aéreo. Y es que el Consistorio noveldense ha conseguido, tras seis meses de estudios, gestiones, pruebas y solicitudes, obtener los permisos necesarios para utilizar drones en la inspección del campo.
Con los drones los agentes podrán vigilar, con menos recursos humanos, materiales y una mayor facilidad y eficiencia, las más de 250 parcelas dedicadas al cultivo de la uva de mesa en la localidad. Son mil hectáreas repartidas en los 72 kilómetros cuadrados del término municipal. Una amplia extensión de terreno que a vista de pájaro es mucho más fácil, rápido y cómodo de controlar. Máxime si a estas pequeñas naves se les dota de cámara térmica y gafas de visión.
El alcalde Fran Martínez y los concejales de Seguridad Ciudadana y Agricultura, Armando Esteve y Jorge Miralles respectivamente, ya se reunieron en julio pasado con los mandos de la Guardia Civil y de la Policía Autonómica, y también con el subdelegado del Gobierno en Alicante y los representantes de las organizaciones agrarias, para plantearles la posibilidad legal y material de empezar a utilizar estas modernas aeronaves durante esta campaña de recolección. Y así va a ser gracias, también, al empeño del intendente jefe, Juan Carlos Escolano, que desde que conoció estos dispositivos siempre ha mantenido que, por las características de los cultivos y la orografía del Vinalopó, facilitarán mucho la vigilancia rural. Así que el próximo jueves el «guardian» de las uvas comenzará a surcar el cielo de Novelda en una demostración de altas miras.
