El alcalde de Villena, Javier Esquembre, defendió ayer la transparencia del proceso de adjudicación del servicio de recogida de basura y limpieza viaria que se llevó a cabo, en la anterior legislatura, «con el objetivo de dar respuesta a las necesidades locales con la mejor oferta, aunque no la más económica», aseguró.

Esquembre quiso aclarar algunas de las consideraciones establecidas en el informe emitido por la «Sindicatura de Comptes» de la Comunidad Valenciana tras analizar la adjudicación, en la que el Ayuntamiento de Villena no queda bien parado. Así, la primera autoridad local califica de «subjetivo» el análisis realizado por el organismo valenciano sobre el proceso de adjudicación del servicio de basura.

Esquembre subrayó que el informe no señala ninguna irregularidad en la licitación del contrato aunque alerta de que en la adjudicación la oferta económica no tuvo preponderancia sobre otros criterios. «Queríamos la mejor oferta que garantizase la calidad del servicio, no la más barata», explicó Esquembre quien reconoció que además de la oferta económica se valoraron aspectos «medioambientales, plan de igualdad o capacidad de fiscalización». Así, el informe argumenta que el tipo de contrato «especial» no es el más adecuado. No obstante, el alcalde afirmó que una de las empresas que no consiguió la concesión inició un contencioso administrativo sobre el tipo de contrato y «el tribunal número 2 de lo contencioso administrativo de Alicante, dio la razón al Ayuntamiento reafirmando que se trata de un contrato especial», insistió el alcalde.

Javier Esquembre reconoció que han existido problemas con la ejecución de los pliegos de condiciones por parte de la empresa concesionaria, «de hecho es la concesión más analizada y el Ayuntamiento inició un expediente sancionador de 75.000 euros por incumplimiento de contrato por la falta de limpieza de contenedores o de ubicación de papeleras, una demanda que la empresa ha recurrido».