El equipo de gobierno de Novelda -PSOE y UPyD- ha decidido congelar los impuestos y subir tasas un 9% el próximo año. Una medida que los dirigentes municipales justifican en cumplimiento del Plan de Ajuste y con el objetivo de reducir el déficit de los servicios que se prestan.

El responsable del Área Económica, Armando Esteve, adelantó ayer que el ejecutivo presentará al pleno extraordinario la propuesta de modificación de ordenanzas fiscales que contempla la congelación de impuestos como el IBI, IAE, Circulación y el que grava el incremento del valor de los terrenos, y una subida media del 9% en las tasas de los servicios que no son de primera necesidad o de carácter obligatorio. Según ha indicado Esteve «los impuestos, que suponen la mayor parte de los ingresos municipales con 10,7 millones de euros en 2014, no subirán ni siquiera el IPC, pero las tasas, que en 2014 aportaron 2,7 millones a las arcas del Ayuntamiento, deben tender a cubrir el coste del servicio y, sin embargo, en Novelda el déficit por servicio supera el 80%». En este caso la subida media del 9% «está en consonancia con el aumento en la previsión de ingresos contemplada en el Plan de Ajuste que el Ayuntamiento tuvo que aprobar al encontrarse, según el Ministerio de Hacienda, en riesgo financiero por superar el límite de endeudamiento y el plazo medio de pago a proveedores», ha añadido el responsable económico del gobierno local precisando, al respecto, que «las tasas que deben tender a disminuir su déficit e intentar que los servicios sean cubiertos por los usuarios y no recaigan en el conjunto de los ciudadanos».

Modificación presupuestaria

El equipo de gobierno también aprobará una modificación de crédito del actual presupuesto para poder costear la ayuda a los libros de texto, que ha sido anunciada por la Conselleria de Educación, y también para hacer frente a facturas sin consignación.

La modificación, cifrada en casi 500.000 euros, destinará 383.746 euros al pago de facturas pendientes de la anterior legislatura, que no tenían consignación presupuestaria porque «se quedaron en el cajón», y otros 130.000 euros para prever el gasto de la parte que al Ayuntamiento le corresponderá este año en el plan de ayuda a los libros de texto que se va a cofinanciar por los ayuntamientos, la Diputación y la Generalitat. En este caso, según Esteve, el hecho de tener que destinar tal cantidad económica a los libros de texto supondrá que no se pueda disminuir deuda ni pagar otras partidas al ritmo deseado. No obstante cree que «es una obligación ir sacando las facturas de los cajones» para acabar con el engaño de la deuda.