Los trabajos de limpieza, mantenimiento y adecuación del cauce del río Tarafa a su paso por Aspe comenzaron ayer con el fin de evitar posibles inundaciones por lluvias torrenciales tras el riesgo de que se produzca una gota fría en el inminente otoño.

Las tareas las están dirigiendo las concejalías de Medio Ambiente y Servicios junto a la asociación medioambiental Amatarafa, con quien el Consistorio aspense tiene un convenio de colaboración, tras obtener la autorización de la Confederación Hidrográfica del Júcar.

Según explicó ayer el concejal de Medio Ambiente, Iván Escobar, «los trabajos se llevarán a cabo a lo largo de los nueve kilómetros de la senda del Tarafa. En los tramos no urbanos se hará un desbroce del matorral que invade la senda y del cauce de la rambla, mientras que en el tramo urbano se efectuarán trabajos de desbroce, limpieza y repoblación vegetal con especies autóctonas y la eliminación de especies invasoras, así como la reparación de la señalización». El responsable municipal del área también ha confirmado que se va a reponer todo el vallado que ha sido sustraído.

Respecto al retraso que han sufrido estas labores el edil de Izquierda Unida ha indicado que «se ha decidido actuar así para no coincidir con el periodo de nidificación de las numerosas aves que habitan en el Tarafa». Precisamente, gracias a la colaboración de la Asociación Cardelius, se han podido catalogar hasta la fecha 29 especies diferentes de aves. «Tenemos que concienciarnos de que hay que disfrutar del cauce del río, pero al mismo tiempo también proteger su flora y fauna. Es el principal pulmón verde de nuestra población, un patrimonio natural de todos y todos tenemos que estar concienciados para conservarlo», ha subrayado Iván Escobar.

Por último cabe señalar que estos trabajos de limpieza del río van a crear empleos para trabajadores de Aspe con una inversión superior a los 20.000 euros.