El verano siempre ha sido una época mala para los animales domésticos, que en muchas ocasiones, se han visto abandonados por sus familias una vez llegan las vacaciones. Una tendencia que cambió con la crisis, convirtiéndose en un hábito continuado durante todo el año, pero que este verano ha vuelto a repuntar. En Alicante, por ejemplo, el número de abandonos de animales ha ascendido en un 20%.
Ante esta situación, la protectora de animales de Elda se convierte en el lugar de acogida de todos los animales desamparados. Sin embargo, el aumento de «inquilinos» ha causado que el albergue del Medio Vinalopó encuentre problemas a la hora de mantener las instalaciones, que siempre han estado subvencionadas por la Mancomunidad del Vinalopó, pero que actualmente han perdido un 30% de las ayudas. Por eso, desde la protectora buscan reunirse con las autoridades de Elda, Petrer, Monóvar y Sax -localidades que conforman la Mancomunidad- para solucionar esta situación. Mientras tanto, los socios, algunos particulares y otras asociaciones de animales, ayudan económicamente al albergue eldense.
Los que más sufren
«Al final, siempre el que sufre es el animal», explica María Pérez, una de las trabajadores de la protectora del Medio Vinalopó. Por ese motivo, desde el albergue, realizan actividades para que la estancia de los animales sea lo más agradable posible, hasta que alguna familia decida adoptarlos o acogerlos temporalmente. Todo ello, sin olvidar la importante tarea que cada miércoles por la tarde y cada sábado por la mañana, desarrollan los voluntarios con los perros y gatos del lugar. Este grupo de personas, de manera desinteresada, pasea a los animales, ayudan con la medicación de cada uno de ellos, les dan de comer y de beber, limpian sus habitaciones, los asean y sobre todo, les dan todo el cariño que necesitan para que la estancia de estos animales en el albergue, sea lo más fácil posible. Aunque sin duda, el objetivo final de todo este proceso es la adopción de los «inquilinos» por parte de familias, tanto locales, como extranjeras. Sobre este último punto, María explicó: «Se ha potenciado la adopción en el extranjero porque allí hay otra mentalidad y están más concienciados en lo que respecta al abandono de animales». Francia, Alemania, Holanda, Suiza o Inglaterra, se han convertido en los países con más adopciones de animales procedentes de España.
El abandono de animales domésticos se ha convertido en un problema de educación. Muchos de los animales encontrados estaban previamente perdidos. Otros, son llevados a la protectora por los dueños. Sin embargo, la aparición de perros y gatos en contenedores, continúa vigente.
