Un futuro incierto se cierne sobre la empresa municipal Emidesa -editora de Vivirdigital y la revista Vivir- tras dos años seguidos con pérdidas en su contabilidad. Su nuevo presidente, José Domingo Malea, indicó que «la empresa pública se encuentra, por imperativo legal, en causa de disolución en base a la normativa mercantil y administrativa vigente».
En este sentido, la última acta del consejo de administración de la mercantil, de propiedad municipal, es clarificadora. En la reunión, el asesor explicó que sólo había tres soluciones viables para ella. La primera es una ampliación de capital; la segunda, su fusión con otra empresa de titularidad municipal; y la tercera es su liquidación o cierre.
Ante esta realidad, Malea aseguró que «de las tres opciones, ahora sólo quedan dos, porque si se hubiera optado por una ampliación de capital el gobierno del PP debería haberla hecho con anterioridad». Así, el consejo deberá decidir en la primera quincena de septiembre si el futuro de Emidesa pasa por integrarse dentro de otra mercantil pública o por su cierre definitivo.
Para Malea, los culpables de la situación que vive la empresa tiene nombre y apellidos. «El futuro de Emidesa está determinado por las decisiones que en los dos últimos años ha tomado el PP» apuntó. Emidesa cerró 2012 con 9.400 euros de beneficios y un presupuesto de 400.000 euros. En 2013, el año de los despidos masivos, en diciembre se encontró con unas pérdidas de 34.775 euros mientras que en 2014, con un recorte de presupuesto de 250.000 euros menos, la empresa pública obtuvo unos número rojos de 99.635 euros.
En el acta del último consejo se especifica la «ruinosa» situación que se debe al coste de las indemnizaciones por despido. Del 2012 al 2014, la empresa pasó de contar con 22 a trabajadores a quedarse con sólo tres. En 2013 y 2014, la mercantil pagó más de 100.000 euros en indemnizaciones a los trabajadores despedidos y 25.000 en minutas de abogados por los contenciosos que ellos interpusieron al considerar que se habían lesionado sus derechos laborales. Y todavía le queda por solventar la situación con dos ellos, cuyos casos están en los juzgados. Malea puntualiza que «desde mi punto de vista, los criterios que se siguieron a la hora de formalizar los despidos fueron poco empresariales».
El socio mayoritario de Emidesa, el Ayuntamiento, deberá decidir qué hacer con ella. Y en el caso de que la empresa siga adelante, su presidente tiene claro que el criterio editorial debe variar. Malea es partidario de que Elda tenga un medio de comunicación público que dé información de las más de 25 entidades y asociaciones del tejido cultural, social y deportivo de la localidad.
Desde luego, Malea no quiere seguir la estela impuesta por el gobierno de los populares. El nuevo presidente argumenta que «la revista Vivir se había convertido en un modo de publicitar la acción de Adela Pedrosa». Y demuestra su afirmación subrayando que «la foto de Adela Pedrosa apareció en la edición de Navidad de 2014, 35 veces y en marzo de 2015, en 15 ocasiones». Además remarcó que «existe la posibilidad de rescatar la radio, pero todas las decisiones que estamos poniendo sobre la mesa las deberá ratificar el consejo de administración».
El presidente, también expondrá en el órgano administrativo la idea de poner en valor muchos de los activos que tiene en la empresa y que han quedado arrumbados en el sótano como promociones de CD´s, documentales, o incluso vajilla con el escudo de Elda. Son parte del patrimonio eldense.
