La junta directiva de la comparsa Cristianos de Sax ha decidido no admitir las alegaciones presentadas por Pedro Herrero y José Francisco Girona en las que plantean, básicamente, que la elección de Rafael Gil como nuevo Embajador Cristiano no se ajustó a un procedimiento correcto.

Tal y como este diario publicó ayer, los dos aspirantes rechazados consideran que el jurado que calificó sus interpretaciones de la Embajada no fue supuestamente imparcial. Y ello porque entre sus miembros se encontraban Águeda Juan y Eduardo Juan, familiares directos del aspirante que resultó finalmente elegido.

A este respecto la directiva ha expuesto, a través de un comunicado, que el Reglamento de Régimen Interior de la comparsa establece en su artículo 3.5 que, para este caso, se formaría una comisión de evaluación compuesta por una serie de personas, entre las que se encuentran el presidente vigente, que es Águeda Juan, y los expresidentes de la comparsa, siendo Eduardo Juan uno de ellos. Y por este motivo la junta cree que está más que justificada la presencia de ambos en la comisión de evaluación, además de que el reglamento no contempla ningún motivo de incompatibilidad para los componentes de un jurado que estuvo formado por 13 personas.

Una de las leyes que regula la recusación es la Ley Orgánica del Poder Judicial que establece que se dispone de 10 días, desde el conocimiento de los miembros del tribunal, para recusar a cualquiera de ellos siempre que se haga antes de la celebración de la prueba. Pues bien, la relación de las personas que iban a formar el jurado se comunicó a los tres aspirantes en dos ocasiones. Primero en una reunión celebrada el 28 de febrero y después el 11 de junio, no habiendo ninguna impugnación por parte de Girona ni Herrero hasta el pasado 3 de julio. «Esto -se dice textualmente en el escrito de la directiva- supera con creces los plazos que establece la ley y, además, se hace muchos días después de que ya hubiera un veredicto firme donde ellos no habían resultado elegidos».

El órgano que dirige la comparsa también ha puesto especial énfasis en recordar que el resultado de las votaciones fue de empate entre Rafael Gil y José Francisco Girona y que, según propone el reglamento de los Cristianos, el desempate se hizo mediante sorteo eligiendo una papeleta cada uno y siendo el azar quien, definitivamente, dio la victoria a Rafael Gil.

Dicho esto, la directiva que preside Águeda Juan da por zanjada la polémica y muestra su «máximo apoyo al Embajador electo, ya que se trata de una de las figuras más importantes de las Fiestas de Moros y Cristianos de Sax, por lo que se merece el máximo respeto». Así concluye el comunicado.