La alcaldesa de Monforte del Cid, la popular Antonia Cervera, aseguró ayer que el Ayuntamiento ha concluido «el largo, farragoso y obligado proceso administrativo que pone fin a la situación de incertidumbre que han vivido durante doce años los propietarios y vecinos de la urbanización Montecid». Este complejo residencial, construido bajo mandato socialista en 2003, carecía de licencia municipal de obras, lo que provocó ya entonces la apertura de un expediente y sanciones, según ha indicado la primer edil que también ha afirmado que «hoy los vecinos disponen de todos los servicios, entre los que se incluyen alumbrado, limpieza, recogida de residuos, alcantarillado, vigilancia policial o mantenimiento de calles y plazas».

En 2005 la promotora entregó decenas de viviendas sin licencia de primera ocupación que fueron rápidamente ocupadas por sus propietarios. Al nuevo equipo de gobierno del PP se le plantearon dos opciones posibles: desalojar el complejo o intentar regularizarlo, optando el equipo de gobierno de Antonia Cervera por lo segundo. «Así pues desde 2005 los propietarios han atravesado un auténtico calvario, que se agudizó en 2009 cuando la promotora dejó incluso, sin aviso previo, de prestar servicios básicos como la recogida de basuras o la limpieza viaria, que inmediatamente fueron asumidos por el Ayuntamiento mientras seguíamos los trámites para legalizar la urbanización tal y como nos comprometimos», señala Antonia Cervera añadiendo que un año después, en 2010, la promotora dejó sin suministro eléctrico a los vecinos, y «de nuevo el Ayuntamiento salió en su defensa y asumió la instalación de generadores de energía, así como de las conexiones a la red de saneamiento. Y por si fuera poco el sufrimiento de los vecinos -subraya la alcaldesa- el Ministerio de Fomento, anuló el acceso a la urbanización previamente aprobado, y en 2011 el Ayuntamiento se vio obligado a iniciar un proceso judicial para ejecutar los avales que permitiesen concluir las obras de urbanización pendientes, que incluían la vía de servicio, un nuevo acceso, la conexión eléctrica de media tensión y la remodelación de viales».

Doce años después de aquel «desaguisado» la alcaldesa asegura que la urbanización ha sido legalizada y la obra recepcionada, a excepción de una zona verde.