Efectivos de la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF) de la Comisaría Provincial de Alicante irrumpieron ayer por sorpresa en Beneixama en una operación contra la corrupción económica que se ha saldado, de momento, con tres detenidos y numerosa documentación municipal intervenida.
Los agentes llegaron acompañados por la autoridad judicial y cerraron las puertas del Ayuntamiento para realizar un registro que se inició a las 10.30 horas y finalizó pasadas las 13 horas. Mientras tanto varios concejales del PP y PSOE esperaban en la puerta sin recibir ningún tipo de información mientras la noticia se iba extendiendo por este pequeño municipio del Alto Vinalopó, que ha visto alterada la habitual tranquilidad con la que viven sus 1.800 habitantes por un asunto que parte de una denuncia que se ha interpuesto ante la Fiscalía Anticorrupción.
Los policías, algunos de ellos ataviados con chalecos distintivos y ocultando el rostro en sus continuas entradas y salidas del Ayuntamiento, buscaban documentación muy concreta y se llevaron consigo varias cajas que contenían expedientes urbanísticos de diferentes actuaciones. También procedieron a la detención del concejal de Deportes y Medio Ambiente, del exsecretario municipal y del actual secretario accidental. Al primero lo fueron a buscar a la finca agrícola de su propiedad, al segundo a un cursillo que estaba realizando en Villena y al tercero se lo llevaron desde el propio Ayuntamiento, donde se encontraba trabajando en ese momento. Todos ellos fueron conducidos a la Comisaría Provincial de Alicante en los coches camuflados de los agentes y allí prestaron declaración y respondieron a sus preguntas antes de quedar en libertad a última hora de la tarde de ayer.
Durante el registro policial estuvieron presentes varios funcionarios y el propio alcalde de Beneixama, el popular Antonio Valdés, que estaba en su asesoría laboral y acudió al Consistorio instantes después de que comenzara el registro tras ser requerido por los agentes a través de una llamada telefónica. El primer edil se ocultó en su despacho y no quiso hablar sobre este asunto limitándose a señalar por teléfono que lo ocurrido «es una vergüenza». Sin embargo, las fuentes municipales consultadas han indicado a este diario que hoy será el propio alcalde quien tenga que desplazarse a Alicante para declarar ante los agentes de la UDEF. Lo hará en calidad de testigo y, junto a él, también han sido citados un técnico municipal y el arquitecto que redactó el proyecto de rehabilitación de la torre mora, la construcción de origen medieval que se encuentra ubicada frente a la plaza del Ayuntamiento. Esta obra se inició con el propio Valdés siendo alcalde en la legislatura de los años 2003 a 2007 y, tras entrar la empresa adjudicataria en quiebra, terminó de ejecutarse en el siguiente mandato, el de 2007-2011, cuando PSOE y Junts per Beneixama compartían el gobierno local.
Esta operación contra la corrupción económica sigue abierta, abarca únicamente el ámbito local y no se descartan nuevas detenciones a lo largo de esta misma semana.
