El complejo industrial de la antigua fábrica de muñecas Jesmar de Biar, que actualmente ocupa la empresa de productos plásticos Rototank, sufrió ayer un incendio de grandes proporciones que movilizó a 21 bomberos y 10 vehículos de los parques de Elda, Villena, Ibi y San Vicente.

El fuego se originó a las 19.45 horas en una de las tres naves cuando un grupo de operarios se encontraba trabajando en su interior. De hecho, varios de ellos intentaron en un primer momento sofocar las llamas con extintores en la zona de maquinaria desde donde partió el foco inicial. Pero la composición de fibra y goma de las materias primas y los productos elaborados de la factoría avivó el fuego, que avanzó hasta calcinar 1.500 metros cuadrados de superficie -la mitad de la nave afectada- arrasando a su paso varias máquinas de inyección de plástico, depósitos y tanques para líquidos y contenedores de reciclado ya fabricados.

Las altas temperaturas provocaron el colapso de las paredes medianeras y de los paneles traslucidos del techo. Y fue precisamente esta circunstancia fortuita la que, unida a la amplia y rápida intervención de los bomberos, evitó que todo el complejo industrial terminara ardiendo e, incluso, que las llamas pudieran extenderse por los chalés cercanos, sobre los que hubo que establecer un dispositivo especial para evitar que la caída de pavesas pudiera incendiarlos. El humo y los gases encontraron en los huecos de la cubierta de la factoría una «chimenea» que rebajó las calorías permitiendo a los bomberos acceder al interior para sofocar un incendio que a las 21 horas estaba controlado y a las 23 extinguido. Sin embargo, se decidió mantener una dotación de prevención durante toda la noche para evitar nuevos conatos al contener la fábrica material muy inflamable.

En el dispositivo también participaron agentes de la Policía Local y Guardia Civil pero no hubo que lamentar daños personales ni los gases tóxicos supusieron ningún riesgo para la población.