Los autores del estudio se preguntan, a modo de conclusión, si «¿Es Elda, por tanto, el futuro de los países del sur de Europa?» y recuerdan, en tal sentido, que desde el año 2009 los países europeos, especialmente los del sur, fueron llamados a realizar reformas estructurales y a contener el déficit público ya que, según la ortodoxia económica imperante, ese es el único camino para alcanzar la senda del crecimiento y crear empleo. Pero, según advierten los expertos que han tomado a Elda como referente sociológico, ese modelo se basa en una devaluación de los costes salariales y sociales como forma de mejorar la competitividad y la capacidad exportadora del zapato en los mercados globales.

«Por medio de la informalización -destacan- el sector calzado de Elda ha alcanzado de facto, en materia laboral, todo aquello que se exige ahora al conjunto de países del sur de Europa. El radical proceso de informalización que ha tenido lugar en esta ciudad desde finales de los años 70 ha supuesto, por tanto, una verdadera estrategia de devaluación competitiva al eliminar todo aquello que ahora, desde la ortodoxia económica, es considerado como un obstáculo para la competitividad tales como los derechos laborales y sociales, entre otros».

Cabe apuntar, al respecto, que la flexibilización de las condiciones de trabajo en el calzado ha conducido en los 45 últimos años a una informalización generalizada de la actividad económica y del empleo en el sector como estrategia de competitividad. Pero este fenómeno no sólo implica el deterioro de los derechos laborales, sino que además impide acceder a otro tipo de derechos socioeconómicos -jubilación, sanidad, prestación por desempleo- con lo que se produce un menoscabo de la condición de ciudadano. «Y lo más llamativo -concluyen los investigadores- es que la informalidad inherente a la industria eldense del calzado ha adquirido una naturaleza estructural y unas dimensiones colosales. De tal modo que no hay aspecto ya de las relaciones laborales -contratos, salarios, organización de la jornada- que queden al margen de la norma informal del empleo».