El portero de una sala de fiestas de Elda, un ciudadano ruso de unos 30 años, se recupera de las heridas que tres veinteañeros de nacionalidad rumana le ocasionaron tras, supuestamente, agredirlo de forma brutal al denegarles el acceso al establecimiento.

El suceso se produjo sobre las seis de la madrugada del domingo y fue presenciado por numerosos clientes, algunos de los cuales intervinieron para evitar que los presuntos agresores se enseñaran con el vigilante, que quedó inconsciente tendido en el suelo y sangrando por la cabeza mientras sufría convulsiones.

Al parecer, tras impedirles que entraran a la discoteca, los tres jóvenes permanecieron en la calle en actitud desafiante esperando a que saliera del local. Fue entonces cuando uno de ellos rompió un vaso contra el suelo y se dirigió hacia el portero tratando de clavárselo en la cara. Éste eludió el primer ataque con un empujón pero terminó en el suelo y allí recibió patadas por todo el cuerpo y especialmente en la cabeza. Varias mujeres increparon entonces a los presuntos autores y éstos se marcharon del lugar pero, unos minutos después, fueron interceptados por una patrulla de la Policía Local de Elda que había sido avisada del altercado. Mientras tanto otra dotación de la Policía Local acudió a la sala de fiestas y trasladó en su propio vehículo al portero hasta el servicio de Urgencias, donde recuperó la consciencia y quedó ingresado en observación. Una vez realizada la correspondiente identificación, los agentes trasladaron a los tres arrestados a la Comisaría de la Policía Nacional. Así se pudo averiguar que residen en Elda, tienen entre 20 y 27 años y dos de ellos poseen antecedentes penales. Todos ellos están ya en libertad y el portero fuera de peligro.