Cientos de fieles participarán mañana y los próximos domingos, días 21 y 28 de septiembre, en las romerías al santuario de la Virgen del Castillo de la localidad alicantina de Agres, que este año iniciará la restauración de su convento y finalizará la construcción de un lugar de acogida para peregrinos, según ha informado el párroco de la localidad, Mario Gadea.

Asimismo, con motivo de las romerías, durante estos tres domingos el convento del santuario acogerá una misa a las 10 horas y, posteriormente, a las 12 horas tendrá lugar una misa de campaña en la explanada cercana al santuario.

En la localidad de Agres, perteneciente a la diócesis valentina, "existe una gran devoción a la Virgen del Castillo", cuya festividad se celebró el pasado lunes, una devoción que se extiende también a las localidades vecinas de Bocairent, Ontinyent, Banyeres, Muro o Cocentaina y a cerca de 30 pueblos más, "lo que explica el elevado número de peregrinos en estas romerías", ha indicado el párroco.

Igualmente, este año finalizará la construcción de un edificio multiusos para facilitar la acogida y atención a los peregrinos y visitantes, cuyas obras se iniciaron hace un año, y "en breve comenzará la restauración de parte del convento, que está previsto que finalice en verano de 2015", ha comentado el párroco.

La primera fase de la rehabilitación del convento-santuario comenzó hace dos años y consistió en actuaciones en el interior, como la restauración del zócalo con 'taulells' del siglo XVIII y la instalación de un nuevo retablo de San Francisco realizado con cerámica valenciana moderna.

ORIGEN DEL SANTUARIO

Según la tradición, en el año 1484 Gaspar Tomás, un pastor de Agres que era manco, encontró la imagen gótica de la Virgen a los pies de un árbol y, por su intercesión, le fue devuelto el brazo que le faltaba, por lo que los fieles erigieron un Santuario en el lugar del hallazgo, según ha informado el Arzobispado en un comunicado.

La figura que hoy se venera en el templo es una réplica de la original que fue quemada en la última persecución religiosa. Se trata de la advocación mariana de "mayor arraigo popular" en la archidiócesis de Valencia, según el director del Archivo Diocesano de Religiosidad Popular, Andrés de Sales.