El presidente de la Junta Central de Moros y Cristianos de Elda, Pedro García, fue el encargado de prender la mecha de las fiestas del fuego, con el pregón de las Fallas desde el balcón del Ayuntamiento. La familia fallera al completo y decenas de seguidores siguieron las palabras del pregonero y después las de la Fallera Mayor, actos oficiales para iniciar los festejos.
Hoy la ciudad amanece cargada de sátira, humor y color en los nueve distritos falleros eldenses. Las comisiones trabajaron hasta bien entrada la madrugada para mostrar a los ciudadanos su trabajo de todo año, arte efímero que quedará reducido a cenizas el próximo domingo. La buena sintonía entre las fallas y los Moros y Cristianos quedó latente con las palabras de García, quien admitió ante los presentes que «es verdad, soy el el de los Moros y Cristianos, sí, pero soy también el de las fiestas de nuestra ciudad. Somos muy diferentes unos de otros, cada uno celebramos cosas distintas pro en el fondo somos muy parecidos: Trabajamos por lo que queremos y en lo que queremos; regalamos nuestro tiempo en reuniones, horas y horas robadas a nuestra familia y amigos, nos damos a los demás sin esperar nada a cambio», dijo. El punto álgido del pregón llegó con la afirmación de que «tenemos las mejores fiestas de fallas», palabras que llegaron a conmover al público asistente. También, el pregonero tuvo palabras de recuerdo para los patronos de las fiestas, de cuya advocación se cumplen en este 2014 25 años, San Crispín y San Crispiniano, « a ellos les vemos como referente, como ejemplo a seguir». Tampoco olvidó el pregonero a las Falleras Mayores Anabel y Natalia auténticas protagonistas de los festejos. Desde primera hora de hoy, los pasacalles y los almuerzos de hermandad han sido una constante en los distritos falleros, todos ellos presididos por un monumento con divertidas referencias a la actualidad del último año.
