Estudiantes y Cristianos retan al presidente de la Junta Central de Fiestas, Antonio Navajas y al alcalde, Javier Esquembre a echarse sobre la cabeza un cubo de agua helada.

En las fiestas no sólo son desfiles y espectáculo, también se encuentra momentos para la convivencia. Uno de ellos es el que celebran Estudiantes y Cristianos cada 8 de septiembre, antes de subir al castillo para escuchar la Embajada. Las más veteranas del bando de la cruz unen sus fuerzas para ganar la fortaleza a los moros en el Pacto de Alianza.

Después de almorzar, dos representantes de los cristianos y dos de los Estudiantes -Fernando, Barri, Juan y Plácido- declamaron su tradicional parlamento de unión de fuerzas en un tono humorístico.

Este año, sobre dos de ellos cayó un cubo de agua helada. Así se sumaron al reto del «cubo de agua hELAda» contra la esclerosis lateral amiotrófica (ELA) y nominaron a su vez al presidente de la Junta Central y al alcalde para que se sumen a la iniciativa.