La alcaldesa de Elda y vicepresidenta primera de la Diputación Provincial, Adela Pedrosa, votó ayer en contra de la prórroga de una beca, dotada con 800 euros al mes, a la hija de la concejala de Hacienda eldense, la senadora, Virginia Romero. Pedrosa se quedó sola en su negativa en la junta de gobierno de la institución provincial al ser la única que optó por dar su negativa a la aprobación, tal como ella misma confirmó ayer, «por coherencia política».
Según ha podido saber este diario, la postura de la alcaldesa eldense suscitó la polémica y momentos de crispación en el seno interno del máximo órgano de gestión de la Diputación, aunque finalmente todos los representantes del Partido Popular sacaron adelante la prórroga de la beca.
Se trata de una única beca en prácticas dotada con 800 euros al mes, prorrogables a seis meses más. Según explicó la propia Virgina Romero a INFORMACIÓN, «la ayuda es fruto de un convenio de colaboración entre el Colegio de Economistas de Alicante y la Diputación». Romero asegura que «el órgano encargado de seleccionar a uno de sus colegiados, optó por proponer a mi hija, exclusivamente por sus propios méritos académicos y de formación». La senadora, apuntó además que «mi hija obtuvo una calificación de notable en su carrera universitaria como economista y además es licenciada en Derecho. Tiene experiencia como becaria en Londres y también habla idiomas». Romero insistió en que «la propuesta del Colegio se ha basado exclusivamente en sus méritos y capacidad, dado que a los aspirantes se les calificó en función de su experiencia y formación». En cuanto a los criterios de selección para optar a esta ayuda Romero aseveró que «no se realizó baremación alguna, ni siquiera entrevista y tampoco se tenía en cuenta la situación económica de la familia, solo el currículum del aspirante».
Hace seis meses la hija de Virgina Romero, que también fue diputada provincial en la pasada legislatura, fue la primera seleccionada por el Colegio de Economistas para disfrutar de esta beca, fruto del convenio con la institución provincial. En aquel momento, la alcaldesa de Elda, miembro de la junta de gobierno de la Diputación se abstuvo en la concesión de la ayuda. «Consideré que no debía posicionarme en la concesión de una ayuda económica a una persona hija de un miembro de mi propio equipo de Gobierno en Elda», señaló Pedrosa. En cuanto a su cambio de postura de ayer, momento en el que se planteó la prorroga de la beca, Pedrosa aseveró a este medio que «me pareció más coherente votar en contra».
Casualmente, ayer presidió la junta de gobierno el vicepresidente tercero de la institución, César Augusto Asencio, y tal como explicaron las fuentes consultadas, por lo que los asuntos a tratar en la sesión pasaron previamente por sus manos. Además, la concesión de la beca, según las mismas fuentes, está directamente vinculada a su propio departamento. Pedrosa insistió en asegurar que «yo desconocía que este asunto se iba a tratar ayer y que se iba a someter a votación».
El enfrentamiento solapado, aunque notorio en diferentes foros eldenses, que ambas representantes políticas de la ciudad zapatera mantienen desde hace tiempo, podría recrudecerse tras esta polémica.
